La demandada remodelación del consultorio auxiliar de la Seu será una realidad en los primeros compases de la próxima legislatura. Así al menos lo anunció ayer el alcalde de Xàtiva y candidato por el PSPV, Roger Cerdà, al desgranar los detalles de un proyecto ya elaborado que contempla una inversión de 307.000 euros en las obsoletas instalaciones, plagadas de deficiencias de toda índole. El consultorio, encajado en el edificio protegido del antiguo hospital, es una auténtica ratonera que se encuentra en unas condiciones deplorables: hace años que tanto profesionales como usuarios reclaman mejoras estructurales. Tal como recogió este diario, el complejo no cumple los requisitos de accesibilidad ni de seguridad.
Para revertir esa situación, la intervención diseñada apuesta por acondicionar un desvencijado y desaprovechado espacio de 160 m² en la planta baja del ala norte, recayente a la calle Corretgeria y utilizado como almacén, para habilitar, con las condiciones adecuadas de espacio, privacidad y accesibilidad, cuatro consultas de medicina y enfermería que se trasladarían desde su ubicación actual, en una zona no adaptada y con poca iluminación impropia de una atención sanitaria del siglo XXI. Según avanzó Cerdà ayer en el patio del antiguo hospital, el ayuntamiento solicitó una subvención de 100.000 euros para financiar una parte importante de las obras. La cuantía restante saldrá de fondos municipiales.
El candidato del PSPV hizo hincapié en que la intervención «va a suponer una mejora sustancial en las instalaciones del consultorio auxiliar», puesto que dará respuesta a la problemática de las barreras arquitectónicas en el complejo, que funciona en dos plantas diferenciadas. El proyecto ha sido redactado por el arquitecto Vicent Torregrosa, que ya ha trabajado en remodelaciones anteriores del histórico edificio. Una vez iniciadas, las obras se prolongarán durante cinco meses. Según incidió Cerdà, las nuevas instalaciones habilitadas podrían estar operativas a finales de 2020.
Las reformas desplegadas en el antiguo hospital en el siglo XX pasaron de largo por el semisótano en el que se proyecta la intervención, donde se han registrado desprendimientos que obligan a ejecutar trabajos previos de consolidación estructural. El pésimo estado de esta dependencia fue denunciado al área de prevención de riesgos laborales por los profesionales sanitarios, ante el temor de nuevos derrumbes y la existencia de otras deficiencias. En el espacio también se contempla la restauración del techo de madera horizontal, así como otras actuaciones de fontanería y saneamiento, alicatados, pintura, carpintería, iluminación y climatización.
El proyecto incluye el refuerzo del forjado del techo y una intervención previa imprescindible en la planta primera sobre el zócalo de azulejos del XVIII. Igualmente, se plantea la limpieza del artesonado de madera y el realojamiento de los conductos del edificio, para pasarlos por el exterior del mismo y camuflarlos. Por otra parte, se suavizará la rampa de acceso al consultorio, puesto que su pendiente alcanza el 22%. El consultorio del casco antiguo atiende a cerca de 12.000 vecinos, en su gran mayoría de avanzada edad.
Ascensor para la primera planta
El alcalde de Xàtiva también ve necesario que el edificio (donde está también la sede de la Mancomunitat la Costera-Canal, el área de Salud Pública y la UCA) cuente en un futuro próximo con un ascensor para que se pueda acceder con silla de ruedas a la primera planta. El candidato socialista subrayó que la reforma del consultorio completará la mejora de las infraestructuras sanitarias de la ciudad, junto a la construcción del futuro centro de salud II de Xàtiva.
El antiguo hospital de la plaça Calixte III data del siglo XV. A partir de 1984 se acometieron en su seno una serie de rehabilitaciones para transformarlo a lo que es hoy en día. El consultorio ocupa en la actualidad el ala oeste de la planta baja y el entresuelo.
