L'Alcúdia de Crespins ha iniciado este lunes las obras de construcción del paso subterráneo para vehículos después de solventar los escollos que han ralentizado el proceso. La primera parte de la última fase, la 3.1, contempla la construcción de rampas para el tráfico rodado en las vías del tren, así como la integración de esta obra en el entorno urbano. Luego se ejecutará la fase 3.2 y, por último la 3.3 que consistirá en la urbanización de las plazas Pintor Sorolla y Mariano Benlliure. La actuación está valorada en 365.176 euros y está costeada, en gran parte, por el Plan de Servicios y Obras Municipales (SOM) dependiente de la Diputación de Valencia. El resto depende del consistorio municipal entre los que se encuentran los 75.000 euros para ejecutar la remodelación de las plazas afectadas por las obras.

El alcalde de l'Alcúdia de Crespins, Pepe Garrigos, ha manifestado que hoy "es un día muy feliz para todos los vecinos del municipio ya que las obras para construir las rampas han comenzado". "Con esta actuación cumplimos aquello que prometimos al inicio de la legislatura que el gobierno de Javier Sicluna quería separar con un muro y una pasarela aérea que era muy peligrosa", ha matizado el primer edil. "Por lo tanto, todo el equipo de gobierno estamos orgullosos de que las obras se hayan ejecutado tal y como estaban previstas".

Por su parte, el concejal de Urbanismo y Medio Ambiente en el Ayuntamiento de l'Alcúdia de Crespins, Jordi Caparrós, ha explicado que las obras "se prolongarán durante cinco meses". Además, el edil ha subrayado las palabras del alcalde y ha añadido que con estas obras "hemos demostrado al anterior equipo de gobierno que podemos hacer las cosas de manera muy diferente sin ceder ante ninguna administración, al margen del tamaño o el color político ya que nuestra prioridad se centra en luchar por nuestro pueblo".