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Rehabilitación

Arrancan las obras de acceso a la Plaça de la Vila tras adjudicarse por 96.800 euros

Canalizaciones y Derribos Safor logra el contrato para renovar el pavimento en un plazo de tres meses

Arrancan las obras de acceso a la Plaça de la Vila tras adjudicarse por 96.800 euros

Las obras de renovación del pavimento del acceso a la Plaça de la Vila de Ontinyent, desde la calle Magdalena, ya están en marcha. El ayuntamiento ha adjudicado la actuación a la empresa Canalizaciones y Derribos Safor SL —a principios de este mes se formalizó el contrato— por un importe de 96.800 euros, y los operarios de la adjudicataria ya se encuentran trabajando en la demolición del actual pavimento (acera, asfalto y bordillos) para construir una nueva calzada que estará a un solo nivel, con las aceras y el asfalto a la misma cota, aunque con pendientes del 2 % hacia el centro de la calzada, según detallaba la memoria del proyecto. La calle de acceso a la Plaça de la Vila se pavimentará con adoquines de granito, en el caso de la parte central de la calle, por donde circulan vehículos ; y adoquines de piedra en los bordes laterales. La obra se ejecutará en un plazo de tres meses.

La actuación contempla también el soterramiento de una línea de telefonía que se encuentra grapada a la fachada de la iglesia de Santa María, de manera que se aprovecharán las canalizaciones en la calle para incluir esta línea de telefonía. También se preinstalarán conductos soterrados para las futuras instalaciones eléctricas y de telefonía en las viviendas de la calle.

Las obras de renovación del pavimento en el acceso a la Plaça de la Vila dan continuidad a los trabajos de mejora de las infraestructuras hidráulicas ejecutadas en el histórico barrio ontinyentí desde 2015 (acaba de concluir la tercera fase de estos trabajos).

La actuación se acomete en una área protegida, el barrio de la Vila está declarado Conjunto Histórico-Artístico y protegido como Bien de Interés Cultural (BIC), por lo que los trabajos se ejecutan de manera coordinada con arqueólogos, que inspeccionan las obras para recuperar, inventariar y documentar los materiales arqueológicos que puedan hallarse durante la obra.

La calle de acceso a la Plaça de la Vila se embellecerá con la instalación de seis jardineras, bolardos, mobiliario urbano —que se desmonta durante la obra y se instalará posteriormente. También está previsto adecuar el murete de piedra que existe en la calle y que sirve de barandilla, un muro que será enlucido con mortero de cemento y posteriormente con pintura, según detallaba la memoria del proyecto. La obra, con una duración de tres meses, está previsto que acabe a finales de agosto.

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