En la Vall d'Albaida el desempleo registrado el pasado mes es de 6.044 parados, hay 271 personas más sin trabajo que en el mes anterior y 210 menos que en 2018, un aumento mensual de 4,69% y una reducción interanual de 3,36%. En la Canal de Navarrés hay 1.145 parados registrados en el mes de julio, por tanto, hay 49 parados más que en el mes de junio y la reducción interanual es de 1,38%.

En cuanto a la contratación, y según informaron ayer desde UGT-PV en las tres comarcas, en la Vall d'Albaida se han registrado 3.268 contratos este mes de julio, lo que ha supuesto 307 contratos más que en 2018, un 10,37% de aumento interanual. Por géneros, 1.252 han sido a mujeres (38,31%) y 2.016 a hombres (61,69%). La contratación indefinida mensual de julio de este año es de 255 contratos (7,80%) y la contratación temporal es de 3.013 contratos lo que significa un 92,20%. En la Costera se han registrado 1.717 contratos este julio, lo que ha supuesto 14 más que en 2018, un 0,82% de aumento interanual. Por géneros, 811 han sido a mujeres y 906 a hombres. La contratación indefinida mensual es de 201 contratos y la contratación temporal es de 1.516 contratos lo que significa un 88,29% y la indefinida en 11,71%. En la Canal de Navarrés se han registrado 834 contratos este julio, lo que ha supuesto 208 menos que hace un año, un 19.96% de disminución interanual. Por géneros, 442 han sido a mujeres y 392 a hombres. La contratación indefinida de este mes es de 43 contratos y la contratación temporal es de 791 contratos lo que significa un 94,84% y la indefinida en 5,16%.

Para Raül Roselló, secretario intercomarcal de UGT, en los últimos años se observa «un cambio de tendencia, ahora con un mercado laboral que tiende a periodos estacionales de crecimiento de empleo más cortos y con mayor rotación en la contratación. Lo que no cambia es el dato de contratación temporal, que sigue siendo alarmante, cuando el empleo que crece es el más precario; solo un 8% del empleo que se ha registrado este mes es indefinido».

Roselló afirma que «es necesario un impulso de las políticas de empleo de calidad, que den un nuevo ritmo del sistema productivo que consoliden y hagan crecer la estabilidad en el mismo. Ayudaría en todo esto, que al servicio de empleo (Labora-Servef) se le dotara de mayor número de recursos materiales y humanos para mejorar la ejecución de las políticas activas de empleo y formación», concluye.