La Fira de Bestiar y todo lo que la rodea fue este año, de nuevo, la actividad más madrugadora de la feria. El recinto junto al pabellón de voleibol abría a las nueve de la mañana para dar paso a los primeros visitantes. A las doce del mediodía, el personal del centro hípico Font del Saladrar dirigió la primera exhibición del programa de este año con diferentes tipos de doma en pista cubierta. Hoy jueves, primera día de la feria de ganado, la apertura del recinto será igualmente a las nueve de la mañana y una hora después, a las diez, arrancará el XLIV Concurs de Tir i Arrossegament de la Fira de Xàtiva, puntuable para la Liga de la Federación Valenciana de la especialidad. A las doce, los alumnos del Saladrar ofrecerán una demostración ecuestre y por la tarde, de cinco a ocho, segunda ronda del concurso de tiro y arrastre.

Las mejoras introducidas los dos últimos años en el recinto ferial han derivado en tres espacios claramente separados y diferenciados: uno para el tiro y arrastre, que ya hace un lustro que dejó el emplazamiento de Angel Lacalle, junto a la piscina Murta; otro para la compraventa de animales y otro para la doma y las exhibiciones ecuestres, dos de las actividades que se repiten de hoy al sábado y que complementan la vertiente meramente comercial. Por segundo año, la Fira de Bestiar cuenta con una gran carpa adicional para así ampliar la zona de sombra.

La de 2018 fue la primera edición de la feria de ganado regulada por una ordenanza municipal cuya misión, según explica el consistorio, es «garantizar las condiciones de salubridad y seguridad de los animales», evitando situaciones de maltrato. Hay al respecto un total de siete puntos de obligado cumplimiento.

Los primeros curiosos no se hicieron esperar y pese a que la tradición de que el 14 de agosto sea ya Fira de Bestiar aún es muy nueva, puesto que la feria en realidad, se inauguraba anoche, ya está comenzado a arraigar el dejarse caer por la instalación. Cabe recordar que la Fira de Bestiar se trasladó a este emplazamiento, separado de la feria comercial general, en 1997. Hasta 1996 ocupaba el solar del Camp de d'Alt, donde hoy se alza el Gran Teatre. La evolución que marcó aquel traslado, muy denostado los primeros años, hoy no se discute. Bien entrada la década de los 90, la Fira de Bestiar en ese solar era una estampa entrañable y pintoresca pero anclada en el siglo XIX por lo que a medidas de higiene y salubridad se refiere.

El viernes y el sábado

El resto de la programación en torno a los caballos sigue igual mañana viernes. A las nueve, apertura del recinto; de 10 a 14 horas, segunda jornada del concurso de tiro y arrastre. A las doce, exhibición de doma en la carpa. Y por la tarde, de 17 a 20 horas, segunda tanda de la competición de tiro y arrastre. Y el sábado, idéntico desarrollo. Fuentes municipales destacaron ayer la «consolidación» de este formato, que enriquece una muestra germen de la Fira.