Después de poco más de 48 horas des del inicio de la Fira d'Agost la Reina Laura Vidal Martí y sus damas de honor ya han empezado a descubrir los secretos de la fiesta. Aquellos sitios donde un joven nunca va, ya sea porque son demasiado pronto o demasiado tarde, aunque sean de los más representativos de la fiesta. Dos intensos primeros días plagados de actos (inauguración de exposiciones, carrera de motos, albaes, conciertos,...), en los que los actos se solapan y en los que apenas han podido dormir. Pero aún así, la Reina no duda en afirmar que esta forma de vivir la Fira «es increíble, lo recomiendo», recalca.
Laura, acompañada por sus damas de honor Belén Soriano, Violeta Sanchis, Andrea Vidal y Rebeca Marras, y por sus acompañantes David Taengua, Ximo Correas, Josep Mallea, Jorge Maravé y Borja Sanchis empezaron esta nueva feria después de un discurso inaugural en el que Laura hablaba no solo de lo que significa para ella hoy en día ser la Reina de la Fira, sino de lo que ha sido para ella la feria desde que era pequeña. Acto seguido, los protagonistas de esta feria se trasladaron hasta Sant Pere para disfrutar del Cant d'Albades, que para Laura «es lo que más me ha sorprendido, nos lo pasamos muy bien».
Pero las sorpresas no han hecho más que empezar, ya que una de las jornadas más fuertes de la fiesta, la del 15, ya ha pasado: día de inauguraciones y de motos. Uno de los días más grandes de la fiesta en el que los mayores fans del motor pueden disfrutar de la carrera de motos más antigua de España en circuito urbano. La Reina y la corte de honor pudieron vivir la fiesta desde dentro «y luego nos dejaron escoger a qué acto queríamos ir entre aquellos que no son oficiales como el concierto de Carlos Baute o de Andreu Valor», optando ellas por el venezolano.
Un día largo al que ha seguido otro repleto de actos. «Solo han pasado dos días, pero estamos durmiendo poco. A las 9 de la mañana ya habíamos quedado», comentaba Laura ayer sin quitarse la sonrisa de la cara. Porque aunque los días parezcan enlazarse entre sí, sin tiempo apenas para el descanso, ella lo tiene claro: «aunque no haya terminado la fiesta, ya lo recomiendo, es increíble».
Laura, que ha participado durante años en el concurso de pintura para niños, ayer asistía a este acto como Reina. «Ha sido muy especial, aunque han cambiado muchas cosas; entre otras, los premios, que ya no son los mismos pero me ha hecho mucha ilusión volver a ir desde otra perspectiva». Otra de las cosas que más ilusión le han hecho es disfrutar desde primera línea de la mascletà, «era la primera vez que encendía una!», decía muy emocionada, a punto de volver a encenderla.
Pero el grupo de jóvenes, al que Laura califica como «piña», no están solos. El alcalde, junto con los regidores también se desplazan con ellos a cada acto y disfrutan así de la fiesta con los máximos responsables de la ciudad. «Todos son muy simpáticos, no me esperaba lo cercanos que son con nosotros y, aunque controlan que todo salga perfecto, también nos dejan disfrutar de esta feria, que será irrepetible para nosotros».
Una fiesta en la que, como explica Laura «se aprenden muchas cosas, vas a sitios a los que nunca has ido y que tampoco irías», ya que la Fira d'Agost está llena de tradición. Una tradición que parece estar muy alejada de los más jóvenes «y que si no fuera por esta experiencia no hubiera ido nunca». Es por ello que Laura quiere aprovechar e ir a todos los actos posibles para poder descubrir la feria al completo, con unos acompañantes «inmejorables» y que la hacen aún más especial.
