La conselleria de obras públicas mantiene cerrado al tráfico desde el lunes el tramo de la CV-81 comprendido entre Bocairent y Ontinyent con motivo de las obras de estabilización de taludes para mejorar la seguridad vial en la carretera. La interrupción del tráfico -que se retrasó una semana por la DANA- se prolongará previsiblemente hasta la tarde de mañana por la presencia de maquinaria que no se puede retirar y que trabaja noche y día en la zona. Un servicio de vigilancia controla que solo los vehículos de emergencia puedan circular por la vía. El corte obliga a desviar el tráfico por la CV-700 y está ocasionando importantes rodeos y trastornos, sobre todo a los vehículos pesados.
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