El acuerdo entre PSPV y Compromís para la elección del presidente y de la nueva junta de gobierno de la Mancomunitat de Municipis de la Vall d'Albaida podría materializarse en el pleno del próximo miércoles. Socialistas y valencianistas han consensuado una propuesta para la junta de gobierno y el reparto de delegaciones que desencallaría el bloqueo de la nueva legislatura, tras el desencuentro entre ambas formaciones en el pleno de investidura del pasado 18 de septiembre. Ahora, PSPV y Compromís han llegado a un acuerdo y han acordado una propuesta, a la que ha tenido acceso Levante-EMV.
Pero dicha propuesta podría desatar ahora el desencuentro con otra formación, La Vall ens Uneix, de Jorge Rodríguez, que gobierna con mayoría absoluta en Ontinyent. El reparto de los once miembros de la junta de gobierno de la Mancomunitat, según la propuesta consensuada, deja la presidencia al PSPV y la vicepresidencia primera a Compromís. Los socialistas contarán con cuatro representantes en el máximo órgano de gobierno (la presidencia y tres vocalías), mientras que Compromís tiene tres (la vicepresidencia y dos vocalías). El PP y La Valls ens Uneix tendrán dos cada uno, aunque los populares amarrarían la vicepresidencia segunda y una vocalía, y la formación de Rodríguez dos vocalías. Desde La Vall ens Uneix esta propuesta no gusta, ni el reparto de delegaciones. Este partido arrasó en el 26M al sumar la gran cantidad de votos en Ontinyent. Fruto de ello, de hecho, es que lograron el diputado comarcal para la diputación.
El reparto reserva al PSPV las áreas de Hisenda (que recaería en la presidencia); Benestar Social, Igualtat y Sanitat; Cultura i Gestió del Patrimoni Documental; y Turisme i Projectes Europeus. Compromís, por su parte, amarra Medi Ambient, que incluye el servicio de la perrera, el punto en el que se encallaron PSPV y Compromís en el pleno de investidura, y que los valencianistas reclamaron, en detrimento de La Vall ens Uneix. Los valencianistas también se quedan el área de Organització i Promoció Econòmica; y Agricultura i Ramaderia. Por su parte, el PP gestionará el área de Lluita contra el Despoblament i Ordenació del Territori; y Esports i Joventut: esta última se la arrebata a La Vall ens Uneix, que la tenía en la primera propuesta. La formación tendrá Educació e Infraestructures, Transports i Comunicacions, ésta última, una «patata caliente, ante los incumplimientos del Estado y la conselleria en la comarca», según deslizan algunos dirigentes de La Vall ens Uneix, que tampoco tendrán representación en el Consorci de les Comarques Centrals Valencianes.
La Vall ens Uneix ya advirtió hace semanas sobre el «déficit democrático» de la Mancomunitat de la Vall por considerar con el «mismo peso» a la capital de la comarca, con 36.000 habitantes, que a una localidad de 1.000 vecinos. Además, avisa que la entidad comarcal «depende en gran medida» de las aportaciones económicas del Ayuntamiento de Ontinyent, por lo que señalan que si la propuesta sale adelante se puede desatar «una tormenta perfecta».
