El dietista, nutricionista e investigador Julio Basulto impartió ayer por la tarde en el Teatre Echegaray de Ontinyent la conferencia Aigua i salut, en la que abordó las repercusiones ambientales y sobre la salud que tiene el consumo de agua envasada en plástico. También trató de desmontar algunos mitos sobre el agua y los perjuicios del cloro, o la relación de las aguas duras (con alta concentración de minerales disueltos) con las piedras en el riñón.
Basulto afirmó que hay que beber «agua del grifo en función de la sed» e insistió varias veces durante su intervención en que hay que beber cuando se tiene sed. Sobre los consejos que «muchos sectores interesados hacen creer» sobre los beneficios de beber mucha agua para mejorar el rendimiento académico, intelectual y físico, Basulto aseguró que «no funciona así» y explicó que si se bebe más agua de la necesaria, sin tener sed, esa agua se elimina. Lo comparó con un vaso, explicando que si a uno lleno se le añade más agua, esa agua se derrama. Sobre la hidratación, afirmó que «hay un amplio margen, hay gente que tiene más sed y gente menos».
La conferencia de ayer se enmarca en el programa de actividades de la campaña Aigua d'Ontinyent, per a beure, per a viure, que impulsan el ayuntamiento ontinyentí y la empresa Egevasa «para poner en valor la importancia económica, social y sentimental del agua de la ciudad», remarcan. Dentro de esta campaña, el consistorio también inauguraba días atrás la exposición Ontinyent, fets d'aigua, una muestra que cuenta con un fondo documental de más de 2.000 fotografías, vídeos interactivos, documentos históricos y elementos patrimoniales. La exposición, organizada por el ayuntamiento, Egevasa y Global Omnium, podrá visitarse en la Casa de la Cultura hasta el 4 de enero de 2020.
