El confinamiento impuesto por el estado de alarma ha despertado el ingenio popular. Para evadir la pena del encierro en casa, han surgido múltiples iniciativas de parte de ciudadanos anónimos, variadas y divertidas formas de mantener la interacción social y sacar una sonrisa a sus vecinos y vecinas. Tito Luna, de Xàtiva, es uno de ellos.
La capital de la Costera es una ciudad muy fallera, y el cancelamiento de las fiestas cayó como una losa sobre los ánimos de sus habitantes. A falta de la programación habitual, Luna está celebrando desde el balcón de su casa, en la céntrica calle Baixada de l'Estació, "mascletaes" diarias en las que hubieran sido las jornadas grandes de las fiestas josefinas. Por los altavoces que ha instalado resuena todo el ritual de cada mascletà: un pasodoble previo, el "Senyor pirotècnic, pot començar la mascletà!", y el festival de truenos que es pieza central de las Fallas. Un generador de humo artificial crea el efecto que desde su casa efectivamente están explotando petardos, un espectáculo casero que provoca la atronadora ovación de sus vecinos de calle. Hoy, día de Sant Josep, Tito Luna "disparará" la última, a las 13:30 horas.
