El tenista ontinyentí y exnúmero uno mundial, Juan Carlos Ferrero, y su escuela de tenis están sufriendo especialmente los efectos de la crisis del coronavirus con la suspensión de cuatro torneos en los que tenían que participar sus tenistas en las próximas semanas. Entre ellos, el Master 1000 en Indian Wells y Miami, en Estados Unidos; y cuatro torneos que tenía que organizar a partir de esta semana. «Vivimos una situación desconocida hasta ahora. Posiblemente ningún club del mundo tenía, como nosotros, tres torneos internacionales y el Campeonato de la Comunitat Valenciana en categoría junior. Todos estos en las próximas cuatro semanas, con lo cual el perjuicio es muy grande», reconoce Ferrero.

Pero el de Ontinyent ha hecho un llamamiento a los tenistas, gente que trabaja en el mundo del tenis y aficionados para que cumplan las indicaciones del confinamiento. Pese al mazazo de la suspensión de los torneos, Ferrero afirma que «lo primero es la salud y por ello apoyamos al cien por cien las medidas impuestas por las autoridades». «Aunque -añade- también tenemos que pensar en nuestra salud y en el bienestar que es el futuro de la economía que dependa de la salud, más allá del coronavirus, y esto pasa porque nuestra economía se recupere con más vigor lo antes posible». Ferrero manifiesta que «es normal y lógico que ahora todos actuemos con prudencia e incluso miedo en el gasto, es totalmente necesario para una vez pase el estado de alarma todos pisemos el acelerador del trabajo a fondo para reactivar la economía».

Sobre la reanudación de la competición, Juan Carlos Ferrero afirma que «nuestro compromiso es hacer todos los torneos que teníamos programados y si cabe todavía hacerlos mejor. Los organizadores, organizarlos mejor; los jugadores, esforzarse al cien por cien en la pista para jugar mejor y dar más espectáculo; y los aficionados, acudir en masa y aplaudir más que nunca», concluía el ontinyentí, que acaba de regresar de Estados Unidos tras la suspensión de las citas de Indian Wells y Miami.