El primer mes bajo el yugo del Covid-19 ya ha terminado, y el balance, en términos de empleo, lo coloca a un nivel más destructivo que los peores de la crisis del 2008, según lamentan los sindicatos. El Servef ya ha hecho públicos los datos de paro de marzo, que se ha saldado en el caso de la Costera, la Canal de Navarrés y la Vall d'Albaida con un aumento del 8,78 % respecto a febrero. En números brutos, un solo mes, el desempleo ha aumentado en 1023 personas en el global de las tres comarcas, al pasar de 11.646 a 12.669 parados. Respecto a marzo del año pasado, el incremento es de 564 personas, un 4,66 %.

Por comarcas, la Vall d'Albaida ha sido la que más ha sufrido: registra 6089 parados, 552 más que el mes anterior (el 9,97 %) y 374 más que en marzo del 2019, el 6,54 %. En la Costera, el paro se ha situado en 5509 personas, 409 más que en febrero y 205 más que el año anterior. Porcentualmente, son incrementos del 7,96 y del 3,87 %. La Canal de Navarrés, por su parte, es la que menos ha notado el parón económico por el Covid-19, al menos en marzo: registra 62 más que en febrero, 1071 personas, pero en cambio ha experimentado un descenso interanual del 1,38 %, al tener 15 parados menos que en marzo del 2019.

Cabe reseñar, por otra parte, que el empleo femenino ha resistido mucho mejor que el masculino: 593 hombres han perdido sus puestos de trabajo, y 427 mujeres. Según comentan desde los sindicatos, se debe a que las actividades esenciales que se han mantenido en la pandemia cuentan con una amplia presencia femenina. Con todo, el número de mujeres desempleadas sigue siendo mucho mayor: 7.765, por 4.904 hombres.

Según declara Raül Roselló, secretario intercomarcal de la Unión General de Trabajadores para las tres comarcas, muchos empresarios del territorio han optado por reducir plantillas "de la manera más lesiva", con finalización de contratos temporales y despidos, en lugar de hacer uso de otros elementos de flexibilidad como los ERTEs. "La elevada temporalidad injustificada y el abuso sistemático de contratos de obra y servicio o eventuales, como venimos denunciando desde UGT, han vuelto a facilitar la destrucción masiva de empleo, con una intensidad incluso mayor que en la crisis del 2008", ha declarado Roselló, que ha destacado que esta pérdida de empleo debe ser "temporal" y recuperable "una vez vuelva a arrancar la economía". Para ello, reivindica una mayor cobertura social que la que ya se ha desplegado desde el gobierno español.

Con todo, el sindicato señala querer huir de "tremendismos", y hace ver que el tejido económico comarcal "tiene sólidas posibilidades de recuperación" si se toman "las medidas adecuadas para acortar la crisis y no dejar a nadie atrás". Para ello, reclaman el compromiso del tejido empresarial, "absteniéndose a alargar innecesariamente los ERTEs y recuperando las plantillas", así como el de las administraciones, incluidos los municipios, que deben "reorientar sus presupuestos hacia el estímulo del tejido económico y laboral y la priorización del apoyo a los colectivos con mayores dificultades", rubrican.