El Ayuntamiento de la Font de la Figuera ha autorizado la realización del mercado semanal de venta ambulante en la Plaça Major y la primera cita tras retomarse la actividad por la crisis sanitaria de la covid-19 se ha celebrado esta mañana de miércoles, con puestos de alimentación.
Desde el momento que se publicó la normativa especifica para seguir en esta nueva etapa de desescalada del confinamiento, el Gobierno municipal, a través de la concejalía de promoción económica y los servicios técnicos, ha trabajado la implementación y adecuación de las medidas concretas para habilitar el espacio público donde se tiene que celebrar el mercado.
Desde el gobierno que preside Vicent Muñoz afirman que «es importante que la actividad comercial vuelva a la normalidad, no solo en cuanto al negocio de los puestos, sino también por lo que representa por el estado emocional de la población, la cual está deseando que algunas actividades y rutinas esenciales por la vida cotidiana, vuelvan a dar ánimos a la ciudadanía».
Normas especiales
A pesar de que se trata de una medida provisional en cuanto a la supeditación a las normas del estado de emergencia, el ayuntamiento ha incidido en qué es de obligado cumplimiento las nuevas normas que se han implementado para usuarios y vendedores del mercado.
Así, se ha habilitado un único acceso al recinto acotado, entrando a la altura de la fuente de la plaza. El acceso ha estado vigilado por la Policía Local para controlar el aforo de personas. Usuarios y vendedores han cumplido con la obligación de ir equipados con mascarillas y guantes (el ayuntamiento dispensa guantes y gel hidroalcohólico en la entrada del recinto, así como mascarillas para las personas que no dispongan). La distancia entre puestos se ha establecido en, como mínimo, 2,5 metros lateral y de 6 metros por la parte frontal. Así mismo, las personas que acuden a hacer la compra, no pueden acercarse a menos de dos metros de la parada, por lo que el vendedor o vendedora deposita los productos adquiridos en una parte habilitada de la parada.
Desde el Ayuntamiento de la Font de la Figuera manifiestan que la reactivación del mercado de venta ambulante «es necesaria para impulsar de nuevo la actividad económica, especialmente de los productores de proximidad, a la vez que se quiere comunicar a la población que el comportamiento personal, ahora más que nunca en esta situación de estado de emergencia, requiere de nuestra responsabilidad y civismo en el uso y utilización de todas y cada una de las actividades que vayamos recobrando, tanto en el ámbito personal como colectivo, y que el cumplimiento y respecto de las mismas, será el camino más corto para llegar a esta nueva normalidad», concluyen.
