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Negociación

Ontinyent acerca posturas con la Policía para su nuevo convenio

El grueso del cuerpo acudió al pleno municipal del jueves para protestar por el devenir de las negociaciones - Ayer celebraron una reunión en la que se sentaron las bases de un nuevo acuerdo

Ontinyent acerca posturas con la Policía para su nuevo convenio

El primer pleno presencial del Ayuntamiento de Ontinyent tras la pandemia de la Covid-19 fue más agitado que su versión telemática de estos últimos meses. La reunión consistorial, que se celebró el jueves a última hora de la tarde en la Sala Gomis, contó con la presencia entre el público de dos colectivos que se han convertido este verano en una patata caliente para el gobierno municipal: el grueso del cuerpo de la Policía Local de Ontinyent, que acudió para protestar por el devenir de las negociaciones de su convenio laboral; y un grupo de vecinos del Camí de Galindo y otras vías cercanas al Pou Clar, para exigir soluciones a las molestias que los turistas les están provocando con especial incidencia este verano. El intercambio de pareceres en el turno abierto de palabra al final de la sesión fue extenso y el tono, especialmente en el asunto de la policía, severo. No obstante, limó asperezas, y sirvió para que el gobierno municipal y los demandantes acercasen posturas. Ayer, tal y como comprometió en el pleno el alcalde de Ontinyent Jorge Rodríguez, ayuntamiento y policías volvieron a sentarse en una reunión en la que se pusieron las bases de un nuevo acuerdo respecto al Pla de Treball de la Policía Local. Ambas partes mostraron su satisfacción por el acercamiento y expresaron su esperanza de que el acuerdo definitivo pueda alcanzarse pronto, incluso en septiembre.

Un convenio que, tras el cruce de comunicados que efectuaron el sindicato policial y el Ayuntamiento de Ontinyent a mediados de julio, no parecía cercano a encauzarse. Esta impresión se acentuó cuando el jueves, en el pleno, los agentes denunciaron que en las nóminas que les habían llegado el mismo día no se les había bonificado la productividad y horas extra trabajadas durante el mes de julio, hecho que afearon a la regidora de Personal, Natàlia Enguix. Tal y como explicaron ayer fuentes municipales a este diario, que no se pagase a los agentes el bono correspondiente a la vigilancia del diseminado respondía al hecho de que en la nota que difundió la Policía Local a mediados de julio se afirmaba que esta vigilancia del diseminado no se estaba produciendo este verano. El pago, pues, se paralizó desde el consistorio a la espera de verificar el concepto de esa bonificación. El futurible acuerdo, según participantes en la reunión, contemplará bonificaciones salariales en función de objetivos generales, sin dependencia, como ocurría hasta ahora, del número de horas extras o del servicio en el diseminado. La próxima semana se celebrará otra reunión, la séptima entre Policía Local y Ayuntamiento, con un borrador de este principio de acuerdo como base.

«Normalidad democrática»

Los 22 policías que acudieron al pleno llevaban una camiseta reivindicativa que referenciaban las calificaciones que aparecían en la nota que el consistorio de Ontinyent emitió el 9 de julio en respuesta al comunicado de la Policía: «No som mentiders. No som xantatgistes. I sí que patrullem en la pandèmia», se leía en la espalda de los policías locales, además de otras ironías. Los agentes también cuestionaron a la concejal Enguix por este comunicado, así como Compromís, que denunció la ausencia en el orden del día. Con todo, tras el debate y ya con un mayor entendimiento entre las partes, desde el Ayuntamiento de Ontinyent celebraron ayer la participación de los agentes en el turno abierto del pleno como un «debate constructivo» y muestra de «normalidad democrática».

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