Tras pasar todo el mes de julio llamando a la responsabilidad de los turistas, esperando que así las conductas incívicas acabasen por terminar, el gobierno de Anna ha decidido optar finalmente por medidas más drásticas para procurar el buen uso de los parajes naturales. Por un lado, el cierre de los accesos a los ríos, que se añaden al de la playa continental del Gorgo de la Escalera; por otro, la prohibición de realizar picnics en ningún punto del término municipal. Con estos dos anuncios, que se hicieron públicos el jueves a última hora de la tarde y que entran en vigor ya para este mismo fin de semana, con una mayor vigilancia por parte de la Policía Local, el Ayuntamiento de Anna espera minorar los malos usos que estaban sufriendo sus parques naturales.

Al cierre del acceso al Gorgo de la Escalera, la alcaldesa de Anna, Pilar-Teresa Sarrión sumó otra medida encaminada a atacar uno de los problemas traídos por la gran afluencia de turistas que se está produciendo este año: las comidas y meriendas en los parajes naturales, que entorpecen el paso de los caminantes y, en los casos de más incivismo, suponen un abandono de residuos muy dañino para estos lugares. Debido a este fenómeno, Sarrión emitió un bando el mismo jueves por la tarde, en el que informaba de la prohibición de hacer picnics en la totalidad del término municipal, a excepción de los lugares destinados para ello.