El nuevo servicio de préstamo de bicicletas eléctricas de Ontinyent ya está más cerca de ser una realidad, destacaron ayer desde el consistorio. Si hace unos meses el pleno aprobaba la ordenanza reguladora del servicio, que también contempla la recogida y mantenimiento de las bicis, ahora el Ayuntamiento de Ontinyent ha sacado a licitación la implantación, gestión y mantenimiento del sistema, por un importe total de 425.920 euros IVA incluido y un periodo de cuatro años. La inversión en suministro, instalación y puesta en marcha del servicio se licita por 120.000 euros más IVA, y el mantenimiento y gestión por 58.000 euros más IVA anuales durante cuatro años. Las empresas podrán presentar sus ofertas hasta el próximo 21 de septiembre.
Como ha explicado la concejala de Sostenibilidad, Sayo Gandia, el servicio contará con 50 bicicletas y un sistema de carga mínima obligatoria de 15 euros al año o bien una carga mínima de 5 euros por 30 días. Gandia considera que con este sistema «se agotan las excusas orográficas o económicas, ya que al ser eléctricas las pendientes de la ciudad se podrán salvar con facilidad y el coste del acceso a este servicio es simbólico».
Según el pliego de condiciones, los usuarios generales accederán gratuitamente a los primeros 30 minutos de cada uso, mientras que los puntuales pagarán 50 céntimos por esa primera media hora. A partir de ahí, en todos los casos el coste será de 50 céntimos por cada tramo de 30 minutos, o fracción. El tiempo máximo de cada préstamo será de tres horas y no habrá límites de usos diarios por cada persona. Las bicicletas se estacionarán en cualquiera de los puntos de aparcamiento que determinará el ayuntamiento.
«La bicicleta es un medio de transporte saludable, individual y muy económico, y potenciando su uso ayudamos a reducir el tráfico de vehículos a motor y la emisión de contaminantes», añade.
