Ayer, Benigànim recibió con un castillo de fuegos artificiales la festividad del 9 d’Octubre. Un acto modesto si se compara con el nivel de pólvora y celebración a que se acostumbra en territorio valenciano, pero que los vecinos y vecinas de la localidad de la Vall d’Albaida recibieron con un sentimiento parecido a la ilusión infantil de quien ve algo por primera vez. Benigànim pasó casi todo el mes de septiembre confinada, y este era el primer evento social público de cierta importancia que veía celebrar desde que reabriese sus puertas, hace poco más de dos semanas. Una puesta en marcha que encontrará continuidad en lo que resta de octubre, que Benigànim espera con una variada agenda de actos sociales, culturales y comerciales. El 9 d’Octubre en Benigànim marca, así, la recuperación de la programación que se tenía preparada para finales de agosto, pero que el segundo confinamiento truncó. Dentro de los estrechos márgenes que marca la pandemia en términos organizativos y de seguridad, la localidad se reincorpora de forma definitiva a la nueva normalidad.
Lo hace ya con solo tres casos activos de coronavirus entre la población, según la última actualización por municipios, del pasado martes. Sin quitarse la mascarilla, ahora se trata de ahuyentar el fantasma de la enfermedad del ánimo de los beniganienses. «Nuestra vida cultural a nivel municipal era nula, incluso antes del confinamiento que sufrimos en septiembre. No consideramos que se haya de recuperar todo lo que hacíamos, pero sí algún acto. Porque el pueblo no puede morir socialmente por aquellas tres semanas de cuarentena». Amparo Canals, alcaldesa de Benigànim, insiste así en la voluntad del consistorio de procurar una «revitalización» de la localidad, aunque sin perder de vista el virus, advierte.
El acto del 9 d’Octubre de Benigànim sintetizará este espíritu. Los portavoces de los tres grupos municipales, junto a la alcaldesa y la regidora de Sanitat, Concepción Moscardó, acudirán al centro de atención primaria a brindar a sus sanitarios el reconocimiento del municipio, por su papel estos últimos meses. «Será un acto casi informal. Iremos cinco representantes municipales, cuando normalmente vamos los trece de la corporación, y en un encuentro al aire libre. Siempre con la idea en mente de no correr en más riesgos de los necesarios», insistió Canals.
Además de los actos oficiales, hoy dará inicio en el Espai Jove de Benigànim el programa Jove Oportunitat de asesoramiento laboral y académico a vecinos de entre 16 y 21 años. En el ámbito cultural, la semana que viene, la localidad iniciará su temporada teatral con la función Alícia en el musical de les meravelles en el auditorio Paco Salvador, adaptado a las circunstancias sanitarias: «Hay entradas disponibles solo en filas alternas, y cuando se reserven unas butacas, el sistema dejará libre un asiento a cada extremo», ejemplificó Canals. Para el 16, 17 y 18 de octubre queda la Fira Outlet, en la que participarán hasta dieciocho negocios locales, según informó la alcaldesa de Benigànim. Y, culminando la reactivación de la localidad, en el calendario de Benigànim se fijará «pronto» la fecha de apertura de la Casa Tudela, o Casa de la Beata Inés, una vez completada su rehabilitación. «Estaba programada para agosto, pero con el confinamiento no pudimos ni completar la limpieza. No hemos concretado fecha, pero será en breve», avanzó el regidor Cristóbal Barceló.
La celebración o no de las fiestas de cada municipio, aun con las medidas de seguridad sanitaria pertinentes, es una de las patatas calientes en la gestión de la pandemia a nivel local. El Ayuntamiento de Navarrés ha vivido una confrontación entre el equipo de gobierno, del Partido Popular, y el grupo municipal del PSPV-PSOE, en la oposición, por la puesta en marcha de una serie de actos festivos a los que los socialistas se oponían. El gobierno local, no obstante, ha optado por mantener el calendario festivo que se había preparado, decisión que contó con el apoyo de las asociaciones culturales locales.
El pasado miércoles, los socialistas pidieron formalmente, a través del registro de entrada de la localidad, la suspensión de todos los actos programados para lo que resta del mes de octubre. Tras recibir esta solicitud, el mismo miércoles por la tarde se reunió de urgencia en la casa consistorial el equipo de gobierno con el PSPV-PSOE y una representación de las asociaciones Amigos de Humet y Fomento Musical de Navarrés.
Según apuntaba el consistorio de forma oficial en un comunicado, el pasado 1 de octubre la corporación municipal en su conjunto, también con el PSOE, aprobó por unanimidad llevar a cabo los actos programados para las fiestas de octubre. «A día de hoy los datos sanitarios son similares a los de la semana pasada, por lo que no entendemos el cambio de opinión del grupo socialista», valoraban.
Por contra, el grupo socialista manifestó que la citada reunión del 1 de octubre fue «meramente informativa» y «extraoficial», sin que se sometiera a votación el programa de fiestas. Asimismo, informó que los datos oficiales de contagios «no son similares a los del 1 de octubre»: en efecto, se han registrado 13 nuevos contagios según la actualización de Sanitat del martes, con lo que la incidencia se ha incrementado por encima de los 300 casos por 100.000 habitantes. Con todo, las celebraciones en Navarrés siguen su marcha, de momento.
