La Guardia Civil ha detenido a una persona e investiga a otra por los delitos contra la salud pública, defraudación de fluido eléctrico y desobediencia a agentes de la autoridad y atentado contra agente de la autoridad. La operación, bautizada con el nombre de "Sibalba", comenzó a principios del presente mes. Los agentes pertenecientes al Área de Investigación de la Guardia Civil de Canals realizaban un servicio para prevenir los robos de productos fitosanitarios que venían produciéndose en la zona y se percataron de un fuerte olor a marihuana que se podía notar a la altura de una antigua granja de conejos de la localidad de Montesa.

El acceso a esta finca estaba cerrado por medio de una cadena y los agentes observaron que un varón accedía con regularidad a la granja, abandonándola varias horas después.

El pasado 12 de mayo, el presunto responsable regresó a la explotación. "Los agentes decidieron informarle de que se iba a realizar una inspección de la propiedad. En ese instante, sin previo aviso, les agredió y obligó a los mismos a proceder a su detención", comentan desde la benemérita. Debido a estos hechos, los guardias civiles tuvieron que ser atendidos por los servicios médicos, ya que sufrieron lesiones leves.

Al día siguiente, en la mencionada finca se realizó un registro autorizado por la autoridad judicial. En una de las naves se hallaron 1500 plantas de marihuana en distintas fases de crecimiento, junto con todos los utensilios necesarios para su cultivo y desarrollo.

Igualmente, se detectó una derivación de suministro eléctrico mediante un enganche directo a la red general. Posteriormente, un técnico electricista pudo verificar la existencia de un delito de defraudación de fluido eléctrico. "De esta forma, toda la propiedad estaba disfrutando de suministro eléctrico de una forma estable", apuntan. La investigación ha permitido la detención de un varón de 61 años. Además, otro varón de 34 años se encuentra en situación de investigado. Ambos individuos son de nacionalidad española.

Los responsables son investigados por delitos contra la salud pública, defraudación de fluido eléctrico, resistencia y desobediencia a agentes de la autoridad y atentado contra agente de la autoridad. Asimismo, se ha incautado, por parte del Área de Investigación de Canals diverso equipamiento: 70 lámparas de 600 vatios, 15 porta lámparas, un cuadro eléctrico y demás material para el crecimiento de las plantas de marihuana intervenidas.

"Sin duda alguna, con esta intervención se ha logrado que la sustancia psicotrópica que nace de estas plantas no haya llegado a la vía pública y, con ello, a los ciudadanos", comentan desde la Guardia Civil. Las diligencias han sido entregadas al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 2 de Xativa.