Antes que nada toca felicitar al Ontinyent 1931 por su ascenso a Preferente. Enhorabuena en lo deportivo y en lo social. Este domingo tendrán una asamblea para aprobar unos nuevos estatutos, entre otros trámites, para consolidar el club y seguir creciendo. Parece que lleve siglos compitiendo, pero esta ha sido su segunda temporada: dos temporadas, dos ascensos. Sigo pensando que su historia puede servir a otros que puedan encontrarse en algo así: la desaparición del club histórico de tu pueblo por impagos. Y confío en que el, cada vez mayor, protagonismo no conlleve perjuicios para otros que ya existían antes y quieren seguir existiendo. Quiero seguir poniéndolo como ejemplo.
Y también mejoran las cosas en el Olímpic. Ya se ha convocado la asamblea ordinaria de socios. El orden del día del cartel no es muy atractivo, salvo que alguien quiera llevar a la asamblea alguna controversia. Más alicientes tiene la asamblea tras anunciar sus dirigentes que se quiere someter a votación un nuevo reglamento de régimen interno para jugadores, cuerpo técnico y directivos; y que se quiere aprobar ya el precio de abonos y pases para la próxima temporada, asunto que, seguro, interesa a los socios o abonados.
Preocupado estoy, sin embargo, por las condiciones de la competición del año próximo: un grupo de 19 equipos, sube el primero y doble promoción para el resto. Difícil, muy difícil lo de salir de la Tercera con un ascenso. Pero no voy a ser yo quien pierda la ilusión por la próxima temporada. ¿Imposible? No. ¿Complicado? Mucho. ¡Me gusta!
