El arte primitivo valenciano está de moda. Así se confirmó el pasado martes en la subasta que organizó en Madrid la firma especializada Ansorena. Los dos retablos atribuidos al enigmático Maestro de Xàtiva que salieron a la venta se vendieron por un valor mayor al precio inicial. Las pujas comenzaron en 18.000 euros y ambas piezas acabaron en manos de un coleccionista por 28.000 euros. El comprador final participó a través del teléfono.
Integradas en un mismo lote, ambas tablas son de pequeño formato —50 por 40 centímetros cada uno— y tienen temática religiosa. Tituladas «Santa Bárbara» y «Misa de San Gregorio», los expertos creen que podrían formar parte de un mismo retablo descabalgado. En abril de 2018 también cambiaron de manos, esta vez en una venta coordinada en Múnich por la casa Hampel.
En Ansorena atribuyen su autoría al Maestro de Xàtiva, que estuvo activo a finales del siglo XV y principios del XVI. Algunas voces lo han identificado con el autor Antonio Cabanes, pero esta hipótesis nunca ha sido confirmada.
La casa de subastas acompañaba las tablas con un estudio firmado por Pierluigi Leone de Castris —conservador del Museo de Capodimonte (Nápoles) — en 2018. Sin embargo, expertos locales cuestionan que las tablas comercializadas en Madrid sean fruto del trabajo del maestro localizado en el municipio setabense.
Marià González Baldoví —exdirector del museo de l´Almodí de Xàtiva— es, quizás, una de las voces más autorizadas a la hora de hablar del enigmático autor. Consultado por Levante-EMV, defendió que parecen obras de dos manos distintas: «En un caso como este hay que ser cauto y decir que hablo por lo visto en fotografías. El estilo del maestro de Xàtiva es más grácil, más etéreo, las figuras no pesan tanto».
El especialista Josep Lluís Cebrián se movió en términos similares, aunque fue un poco más allá y sí lanzó un nombre concreto: «Son obras de un autor contemporáneo, Nicolau Falcó, lo que no quita ni añade valor».
Las tablas ya forman parte de los fondos de un nuevo dueño.
