La quinta ola de la pandemia ha traído consigo la reaparición del virus en latitudes que no experimentaban ningún contagio entre sus poblaciones desde hacía más de un año, en los lejanos primeros meses de la pandemia. Municipios como Rugat o Pinet, en la Vall d’Albaida, o Estubeny en la Costera, pasaron la cuarta, la segunda e incluso la tercera ola —cuando sobrevino el pico absoluto de contagios— sin que sus cifras locales de infecciones aumentasen en un solo caso. La racha se ha truncado este verano. Así, en la estadística de casos de coronavirus por municipios que la Conselleria de Sanitat actualizó ayer, Pinet apareció con tres casos activos, Rugat con uno, y Estubeny con otro contagio.
Tratándose de poblaciones pequeñas, la tasa de incidencia que se traduce de estos contagios está completamente disparada y todas estas poblaciones aparecen en riesgo extremo. Rugat aparece con 632,9 casos por 100.000 habitantes, Estubeny con 826,4, y Pinet con 1910,8 contagios en la tasa por 100.000 habitantes.
Una trabajadora municipal
La plantilla municipal de Millares podría verse afectada por un brote de tipo laboral. Según confirmaron ayer fuentes municipales, una de las trabajadoras ha dado positivo por Covid y «se han aplicado todos los protocolos de prevención». Se está a la espera de las pruebas realizadas a los contactos estrechos de la profesional para confirmar si hay más casos.
Al parecer, la trabajadora se contagió al entrar en contacto con un joven participante de un programa universitario de verano en el municipio, que también ha contraído el virus. Desde el ayuntamiento confirmaron que el estudiante ya ha superado el Covid y ha sido dado de alta.
Tres localidades resisten sin ninguna infección de covid
El resurgimiento del coronavirus en municipios libres de contagios por varios meses no ha sido totalmente generalizada. De hecho, tres poblaciones de la Costera y la Vall d’Albaida resisten aún sin haber registrado ni un solo contagio de coronavirus entre sus vecinos y vecinas en toda la pandemia. Se trata de Vallés, de 154 habitantes, Aielo de Rugat, de 94, y Sempere, el pueblo más pequeño de la provincia, de 34 habitantes.
