Congelación fiscal y ampliación de las bonificaciones por el uso de energías verdes. Son las dos líneas maestras de la modificación de las ordenanzas fiscales que esbozada por el equipo de gobierno de Ontinyent de cara al próximo ejercicio.
La regidora de Hacienda, Natàlia Enguix, confirmó ayer que no ningún impuesto ni tasa que subirá en 2022. En cambio, el consistorio ha querido aprovechar la revisión anual de sus tributos para profundizar en la política de incentivos a la generación de energías limpias en la localidad.
De esta manera, la propuesta de ordenanzas presentada este jueves mantiene la rebaja de los impuestos al autoconsumo energético, reduciendo en un 50% el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) y el Impuesto de Actividades Económicas (IAE) tanto a particulares como a empresas, a tiempo que prácticamente suprime (con una bonificación del 95 %) el Impuesto de Construcciones y Obras (ICIO) para aquellos que implanten sistemas de aprovechamiento de energía solar o térmica en sus propiedades. «Con estas medidas estamos ayudando a la necesaria transición hacia un modelo energético más sostenible tanto para el medio ambiente como para las economías familiares y de las empresas», subraya Enguix.
El paquete de medidas también prolonga la batería de rebajas fiscales que se han ido poniendo en marcha en los últimos años para favorecer la promoción económica. Según la edil, se trata de aprovechar la política fiscal «para generar actividad económica y ayudar a las personas a hacer frente a las heridas que ha dejado la pandemia en la economía».
De esta manera, el consistorio mantendrá las bonificaciones en el IBI y el IAE a las empresas que generen o consoliden trabajadores, así como los incentivos a las pequeñas reformas de viviendas: aquellas obras con un presupuesto inferior a 60.000 euros obtendrán un descuento del 95 % en el impuesto de construcciones. «Tenemos que ser capaces de sostener el tejido productivo de la ciudad y crear escenarios para facilitar las contrataciones. Por eso continuaremos ayudando con rebajas de impuestos a las empresas que apuestan por nuestra ciudad», justifica la propuesta la concejala de Hacienda.
Por otra parte, el Ayuntamiento de Ontinyent ofrece la posibilidad de fraccionar en 12 meses y sin intereses el pago de los tributos municipales con la Cuenta Corriente Tributaria. Para que tenga efectos en 2022, las personas que no se hayan adherido pueden pedirlo antes del 30 de noviembre y librarse de la carga fiscal más cómodamente.
