En Ontinyent, la reivindicación del 8M, Dia de la Dona, también sirvió para denunciar los efectos de la guerra de Ucrania en las mujeres y sus hijos e hijas, como víctimas del conflicto. El manifiesto, que se leyó por la mañana en la colocación de una pancarta reivindicativa, y por la tarde en el acto «Dona i comerç», ponía de manifiesto «no solo la igualdad, sino también la igualdad en paz. Las mujeres somos constructoras de paz, luchamos por los derechos y libertades de todas las sociedades, y en un momento como éste donde se está viviendo un conflicto armado, queremos trasladar nuestra solidaridad con las personas que están sufriendo la guerra, en Ucrania y en Rusia», leía la regidora de Igualtat, Natàlia Enguix. También aludían a los efectos de la pandemia en las mujeres y la violencia de género. Por otra parte, el Palomar acogió el domingo la IX Trobada de Dones, que reunió a mujeres de Atzeneta, Bèlgida, Benissoda, Bufali, Carrícola y el Palomar. Asistieron el alcalde y secretario de organización de la Vall ens Uneix, Jordi Vila, y el diputado provincial por la misma formación, Joan Sanchis.
