El alcalde de l'Alcúdia de Crespins, Pepe Garrigós, confiesa que ha sentido un escalofrío recorriendo su cuerpo cuando ha escuchado la noticia en la reunión que hoy ha mantenido con Adif. El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias ha comunicado al consistorio de esta localidad que las obras de la nueva estación serán una realidad en breve. En junio, de hecho, saldrá a licitación el proyecto del edificio de viajeros, que reemplazará a los actuales barracones tercermundistas donde se recogen los billetes y se coge el tren.
"Después de 11 años hemos visto reconocida la demanda de una estación digna", ha celebrado tras el encuentro Garrigós, que ha salido muy contento del mismo. No es para menos: la infraestructura era el objetivo prioritario que se había fijado al llegar a la alcaldía. Por los tiempos de la contratación, se calcula que en unos dos años podría materializarse la anhelada estación. Los pliegos del proyecto ya están elaborándose en la unidad de contratación y licitaciones de Adif y podrían salir a concurso en junio. Una empresa externa se encargará de diseñar la propuesta y, una vez completada, saldrá a licitación la obra de la nueva estación.
En la reunión de hoy, que se ha celebrado en el salón de plenos del Ayuntamiento de l'Alcúdia de Crespins, han participado el director general de Conservación y Mantenimiento de Adif, Ángel Contreras; el subdirector de Mantenimiento de Infraestructuras Este, Fernando Ugena o la directora general de Obras Públicas de la Generalitat, Roser Obrer, junto a cargos y técnicos de Adif y Renfe.
Otro de los acuerdos adoptados en el encuentro ha sido la creación de una comisión de seguimiento de las obras de la estación con las tres administraciones implicadas, que se reunirá por primera vez la semana próxima. Por parte de la administración autonómica estará presente Roser Obrer y, por parte del consistorio de l'Alcúdia, el concejal de Urbanismo, Jordi Caparrós. Uno de los objetivos de dicho órgano de trabajo será decidir el emplazamiento exacto en el que se ubicará la futura estación, puesto que no puede quedarse donde están actualmente los barracones debido a que las obras del Corredor Mediterráneo obligan a modificar el trazado ferroviario. La propuesta inicial de Adif consiste en desplazar el complejo unos 200 metros del lugar actual hacia la zona del núcleo urbano, aunque todavía está pendiente de adoptarse una decisión definitiva.
El nuevo edificio dará solución a los problemas y las carencias que experimentan los usuarios de Cercanías desde hace más de una década en la parada de l'Alcúdia de Crespins, donde los pasajeros se quejan de la falta de accesibilidad y de la mala señalización de las instalaciones provisoinales, consistentes en unos barracones que se han ido deteriorando y eternizando con el tiempo. La anterior estación de l'Alcúdia fue derribada en 2011.
