Vicente Giner (Llosa de Ranes, 14-10-77) se coronó el pasado fin de semana campeón de Europa de pesca al corcheo en mar por segundo año consecutivo. Enrolado en el club de Gandia —y en la selección española—, ayer atendió a Levante-EMV y explicó que «la pesca es mi vida. Mi padre ya competía. Aunque mucha gente no lo ve así, para mí sí puede definirse como un deporte».

Residente en la misma localidad de la Costera que le vio nacer,  en el campeonato celebrado en Vila Real de San Antonio (Portugal) entre el 18 y el 23 de octubre se enfrentó a otros 54 expertos en el mundo de la pesca. «Fui el que más ejemplares pesqué y registré la captura más grande. Entre los entrenamientos y las jornadas de competición pude cosechar fácilmente hasta 200 peces», expuso. En su nutrida trayectoria en el mundo de la pesca deportiva también ha cosechado campeonatos y subcampeonatos en citas internacionales con el combinado nacional. 

De hecho, en 2021 ya se coronó campeón de Europa por equipos en aguas de Gandia. «Este año ha sido todo más difícil, ya que el año pasado competía en casa y conocía las pesqueras», comentó Giner. La pesca al corcheo es una modalidad deportiva en la que todo el material a utilizar está reglado y las pruebas se dividen en varias mangas: «En una manga hice primero de todos y en otra octavo. Lo importante es que pude revalidar título».

«Los italianos son los rivales más difíciles. Las mejores marcas de cañas son de alli, tienen las novedades antes» «Yo tengo patrocinador, pero para practicar este deporte has de gastar una media de 15.000 euros al año»

A su vez, el residente de la Llosa de Ranes detalló que todos los ejemplares capturados son vivos: «Se devuelven al agua una vez comprobados y medidos. Son competiciones de pesca deportiva con capturas vivas». 

Tras toda una vida con la caña a cuestas, Giner tiene una y mil anécdotas que contar: «Mi mayor captura fue una lubina de cuatro kilos. En las pruebas en las que participo también se pescan ejemplares de sargos, bobas o esparrallones... aunque la presa más preciada es la lisa. Es la más difícil de capturar, es la que todos perseguimos con nuestra caña». 

«No da para vivir»

Vicente Giner es trabajador del sector del metal. Ayer atendió a este diario en una de las pausas de su jornada laboral: «El mundo de la pesca deportiva no da para vivir y, encima acarrea un gasto económico importante. Yo tengo un patrocinador, pero para competir cada año necesitaría una media de 1.500 euros si lo tuviera que pagar todo yo». 

Giner forma parte del equipo de Gandia, que define como una especie de selección valenciana: «Entrenamos juntos y contamos con miembros de Gandia, Alzira, Canals, la Llosa y València capital». 

Consultado sobre los rivales más difíciles, el pescador de la Llosa de Ranes lo tiene claro. «Los mejores, sin duda alguna, son los italianos. Llevan toda la vida pescando, como nosotros, pero además las mejores marcas que comercializan cañas son de allí. Tienen acceso a las novedades antes que el resto. Forman equipos muy potentes. Yo he estado en citas con un podio 100 % italiano».