A las 11.30 de la mañana,un grupo de 40 escolares descubre los secretos ocultos del órgano de la ermita de Sant Feliu de Xàtiva sin quitar ojo al autor de la explicación. Son unos privilegiados: primero porque el instrumento conformado por más de 500 tubos se ha utilizado en muy contadas ocasiones desde su fabricación, segundo porque el templo del siglo XIII rara vez se abre al público y tercero porque quien acciona sus mecanismos ha demostrado sus dotes en los mejores festivales del mundo, con las catedrales de Notre Dame, Colonia y Moscú o en la Basílica de Santa Mariá de Trastevere en Roma como escenarios principales de sus actuaciones.

Arturo Barba, catedrático del Conservatorio Superior de Mústica de València, es el protagonista de la actividad que abrió el viernes el Festival Internacional de Música e Historia de Xàtiva, que se inscribe dentro de la II Fira Borja. Hasta el miércoles, su propuesta pedagógica acercará a más de 200 alumnos de los colegios de la ciudad el funcionamiento de un instrumento «muy desconocido» que «ha estado complemtante olvidado durante 25 años» en Sant Feliu. Barba no solo desgrana su funcionamiento, sino que lo despoja del aura de solemnidad que lo rodea para hacerlo descender al universo de lo mundano, con la interpretación de conocidas melodías de bandas sonoras que embelesan a los niños al sentirlas identificables. El órgano, asegura el catedrático, aún tiene muchas posibilidades culturales por explorar más allá de las litúrgicas. Barba subraya el interés patrimonial del instalado en Sant Feliu —fabricado en los años 90 por el único constructor de estos instrumentos en aquel moento, el setabense Juan Bautista Días— teniendo en cuenta lo escasos que son en la provincia de Valencia. «La aceptación de la actividad es muy buena porque es sorprendente», señala el organista.

No es la única iniciativa del amplio programa musical de la Fira Borja que se despliega en Sant Feliu, que el viernes también acogió la actuación del prestigioso organista alemán Johannes Skudlik, titular de los grandes órganos de Landsber. «De Munic a Xàtiva» exploró los vínculos entre Alemania y España y dio a conocer algunas partituras del histórico compositor Tomás Ciurana, que fue organista de la Colegiata setabense. El propio Barba también ofreció un recital en el mismo templo este domingo con música de los siglos XVII y XVIII y el acompañamiento de un barítono de ópera.

Jonathan Parkin ha rescatado partituras de Luis Milán. | LEVANTE-EMV

El rastro de Luis Milán

El evento ha rescatado la figura de otro compositor vinculado a Xàtiva casi coetáneo de los Borja: las partituras que Luis Milán escribió hace seis siglos sonaron el sábado en el antiguo convento de Sant Domènec interpretadas por otro artista internacional que estrenó actuación. Joathan Ross Parking, un guitarrista inglés recientemente afincado en Xàtiva con varios premios en su haber, decidió explorar la música de Milán tras toparse con el conservatorio que lleva su nombre en la capital de la Costera, con una selección de piezas que adaptan a guitarra las composiciones originales para vihuela y que abordan la influencia del setabense en artistas más contemporáneos como Joaquín Rodrigo. El Festival internacional de Xàtiva también acoge otros estrenos destacados. Este lunes, Capella de Ministrers y la compañía Transfermove, con la colaboración de Toni Aparicio, ofrecen un espectáculo multisensorial dirigido a un público infantil y familiar que combina música renacentista del siglo XV y danza contemporánea y que se inspira en «La dama y el unicornio», una serie de tapices flamencos del siglo XV exhibidos en París y considerados entre las grandes joyas medievales de Europa. Su iconografía evoca una alegoría de los cinco sentidos que el espectáculo trata de representar a través de la música de arpa y viola y de la actuación de seis balarines ataviados con una indumentaria que emula a los animales del tapiz, junto a una soprano.. El director de Capella, Carles Magraner, destaca el acierto de la apuesta municipal por un potente festival renacentista que espera que abra la puerta a los jóvenes para que se acerquen la música antigua desde prespectivas distintas.

Precisamente con ese objetivo, el Fira Borja también incluye un taller de música antigua a cargo de Robert Cases, profesor en el conservatorio superior de música de Castilla-La Mancha.