Denuncian filtraciones, desprendimientos e insalubridad por una casa en ruinas en la calle Carneros de Xàtiva

Las vecinas de las dos viviendas contiguas exponen los daños de humedades, grietas, moho en las paredes y muebles y malos olores que sufren en sus propiedades

Estado ruinoso de la casa de la calle Carneros, con el tejado hundido y un gato sobre un muro.

Estado ruinoso de la casa de la calle Carneros, con el tejado hundido y un gato sobre un muro. / Levante-EMV

R.Tomàs.

El problema de las casas abandonadas y en ruina en las ciudades es preocupante para los ayuntamientos asediados por este asunto, pero sobre todo para los vecinos que residen junto a estos inmuebles, que sufren directamente los daños e incomodidades en sus propiedades. En Xàtiva el problema es más acusado en el casco antiguo, donde hay muchos edificios abandonados y sin habitar desde hace años, que se han ido degradando con el paso del tiempo y las inclemencias meteorológicas. Bien lo saben dos vecinas que viven en las casas contiguas al número 40 de la calle Carneros, que desde hace años denuncian el mal estado del inmueble y los perjuicios a sus casas, con filtraciones, insalubridad, además del riesgo de desprendimientos.

Amparo Tudela y Rosa M.ª García exponen que el deterioro de este inmueble, deshabitado desde hace unos veinte años, "ha ido de mal en peor", llegando a una situación "insostenible" para ellas. No solo por los daños a sus casas, sino a su salud. Una de ellas, Rosa, está trasplantada de riñón y la humedad y el moho derivado de las filtraciones que sufre en su vivienda le está afectando especialmente. "Estoy trasplantada y los efectos de la humedad me afectan mucho. Además de la preocupación de aguantar esta situación desde hace años". En su caso, además es que "el agua cae a chorros a mi casa cuando llueve, por las paredes y por las juntas de los ladrillos. Como no hay tejado, que se ha hundido, el agua me viene directamente, a las estancias de arriba de la casa incluso abajo", denuncia la afectada. Amparo también expone grietas en las paredes, humedades y moho en las paredes, en muebles y en cuadros.

Las dos afectadas explican que el tejado está hundido por las lluvias y temen que ante nuevos episodios de precipitaciones haya más desprendimientos. Y es que ya los han sufrido, como en una ocasión anterior que quedó colgando parte de una uralita y se tuvo que requerir la intervención de la Policía Local para acordonar la zona ante el riesgo que comportaba. Pero ello dejó la cornisa al descubierto, con lo que el peligro sigue presente. Las vecinas temen daños no solo a sus propiedades, sino a los vecinos o a cualquier persona que pase por la zona. Otro problema que denuncian es la proliferación de gatos en la vivienda abandonada, cuya presencia deriva en "excrementos y malos olores por la muerte de algunos de ellos".

Amparo y Rosa expresan su "indignación" por la situación, que califican de "insostenible, de vida o muerte", por los daños que están sufriendo y el peligro que entraña la vivienda. Critican la pasividad de la administración para solucionar el problema y tras varios comunicados y denuncias al ayuntamiento han acudido al juzgado, para interponer una denuncia contra la propiedad del edificio abandonado. Una denuncia ante el juzgado de primera instancia e instrucción nº4 de Xàtiva al que exponen el estado en el que se encuentra el inmueble, los riesgos y peligros de desprendimientos y hundimiento, así como los daños a sus casas. Las dos afectadas reclaman una solución urgente para "evitar males mayores a personas".

Expediente en el ayuntamiento

El Ayuntamiento de Xàtiva afirma que conoce el caso, que tiene un expediente extenso en el consistorio. El concejal de Urbanismo, Ignacio Reig, ha explicado a este diario que han notificado varios requerimientos a la propietaria de la casa, "pero no hace caso, devuelve todos los escritos y requerimientos", y expone que podría tratarse de una persona "insolvente". Reig señala que el problema ha precisado de la intervención de la Policía Local, tal como también exponen las vecinas afectadas, y que desde el ayuntamiento "se está encima del caso. Estamos realizando todos los trámites necesarios para que la propietaria actúe, pero son trámites largos", reconoce Reig, que afirma que el consistorio estudia cómo actuar. "Si hay riesgo grave, habrá que hacer algo". En estos casos el ayuntamiento puede actuar de forma subsidiaria.