Los alcaldes de la Llosa de Ranes y Pinet (PP) ceden el testigo tras 20 años en el poder

Evarist Aznar y Juan Ramón Chismol agotan su último mandato después de cinco mayorías absolutas consecutivas a sus espaldas - Salvi Pardo y Gonzalo Catalá cogerán el relevo como cabezas de lista

Los alcaldes de la Llosa de Ranes y Pinet (PP) ceden el testigo tras 20 años en el poder

Los alcaldes de la Llosa de Ranes y Pinet (PP) ceden el testigo tras 20 años en el poder / Levante-EMV

Sergio Gómez

Sergio Gómez

Por mucho cariño que uno le tenga al cargo, llega un momento en el que todo alcalde decide tomarse un merecido descanso. A un paso de cumplir dos décadas empuñando la vara de mando, Evarist Aznar y Juan Ramón Chismol apuran sus últimos meses al frente de los ayuntamientos de la Llosa de Ranes (la Costera) y Pinet (la Vall d'Albaida).

Ambos han querido apartarse de la primera línea política municipal y ceder el testigo a savia nueva dispuesta a encabezar las listas del PP en sus correspondientes pueblos de cara a los comicios del 28-M.

Sus sustitutos como futuros alcaldables son personas de confianza que ya tienen experiencia de gobierno. En la Llosa de Ranes la ungida como nueva candidata de los populares es Salvi Pardo, actual teniente de alcalde y responsable de una superconcejalía que agrupa las delegaciones de Fiestas, Deporte, Bienestar Social, Igualdad y Sanidad.

Pardo ha agradecido la confianza depositada y se ha comprometido a asumir la vara de mando "con infinitas ganas de trabajar". La regidora aspira a ser la primera alcaldesa de la Llosa, quiere que este municipio "continúe siendo referente, y que, sobre todo, siga sintiéndose orgullosa de su cultura, de su patrimonio y de su gente".

En Pinet, el lugar de Chismol en lo alto de la lista del PP será ocupado por Gonzalo Catalá, que gestiona varias explotaciones avícolas y porcinas a medio camino entre su pueblo y el vecino Llutxent. Catalá conoce a la perfección el funcionamiento del consistorio, puesto que hasta ahora ha ocupado el cargo de primer teniente de alcalde en esta pequeña localidad de 155 habitantes cuya principal prioridad es luchar contra el fantasma de la despoblación y mantener la actividad económica que queda.

"En política tenemos que estar de paso"

Evarist Aznar es el alcalde más duradero de la Costera hasta el momento y el único dirigente del PP que consiguió sobrevivir a los tsunamis de la izquierda de 2015 y 2019 en las urnas. En los últimos comicios conquistó su quinta mayoría absoluta consecutiva en la Llosa de Ranes, pero en la misma noche electoral tuvo claro que sería su último mandato. "Es una decisión muy meditada. Después de cinco legislaturas mi trayectoria a nivel municipal tenía que llegar a su final. En política tenemos que estar de paso y yo he estado mucho tiempo porque he tenido el apoyo de la gente del pueblo que nos han confiado una mayoría absoluta tras otra y eso hacía que cargáramos las pilas en cada convocatoria", señala Aznar a Levante-EMV.

El alcalde destaca la transformación del municipio en estos 20 años con la mejora de los servicios públicos y la creación de nuevas infraestructuras como el auditorio municipal o el pabellón como algunos de los logros de los que se siente más satisfecho. "Con ellos la gente puede hacer cultura, música y deporte en todas las edades. Cuando las ves llenas es una cosa muy grata", subraya.

Aznar se despide después de haber asegurado la financiación para el que prometió que sería el proyecto estrella de esta legislatura: el futuro centro de día para mayores. El ayuntamiento de la Llosa recibirá una subvención de 2 millones de euros a través del Pla Convivint -que involucra también a la Diputación de Valencia y a la Generalitat- para la construcción de un recurso asistencial de carácter comarcal que ofrecerá un servicio "muy importante en el pueblo". "La sociedad envejece y necesitamos este tipo de infraestructuras para que la gente tenga los cuidados necesarios", enfatiza el alcalde.

Otra prioridad que se fijó en 2003 y que Aznar considera cumplida ha sido la de "acabar con la crispación en el pueblo y aportar estabilidad y tranquilidad". "El debate y la crítica son muy importantes, pero desde una visión constructiva, siendo respetuosos con los rivales y los que piensan diferente", mantiene.

En la balanza de alegrías y penas, el alcalde destaca la «satisfacción del trato y el reconocimiento de los vecinos» en la parte positiva. En el otro lado, el de las asignaturas pendientes, Aznar señala las dificultades de los pequeños consistorios para poder llevar a cabo sus proyectos por una burocracia que les «ahoga». «El nivel de exigencia para los pueblos es el mismo que para una gran ciudad pese a que hay mucha diferencia de medios y recursos», apunta. Al hilo de esta problemática, otro reto aún por resolver es el de garantizar una financiación adecuada para la administración local. 

El alcalde de la Llosa y exdiputado provincial tiene claro que su trayectoria en la política municipal ha llegado a su fin, aunque se pone a disposición de su partido si la dirección considera que puede aportar en otros ámbitos. Aznar recalca que su sucesora tiene "unas cualidades perfectas" para ser la futura alcaldesa de la localidad y le ofrece todo su apoyo y colaboración. "Empatiza muy bien con la gente, sabe ser escuchar y ser muy receptiva a los problemas de las personas, como lo ha demostrado en esta difícil legislatura de la pandemia", incide. El 20 de enero será la presentación oficial de Salvi Pardo en una cena con militantes y simpatizantes del PP de la Llosa de Ranes.

De vuelta a Pinet, Juan Ramón Chismol, de 57 años, había compaginado la alcaldía con su puesto como brigadista desde la antigua Imelsa y es el tercer primer edil más más longevo de la Vall d'Albaida, por detrás del alcalde de Aielo de Rugat, Jaime Soler, y del del Palomar, Jordi Vila. Uno de los momentos más difíciles que le tocó vivir fue el incendio de 2019, que arrasó el monte que rodea a la localidad y su mayor emblema -El Surar- y obligó a desalojar a los vecinos. El primer edil coordinó la evacuación junto al primer teniente de alcalde y siguió muy de cerca los