Coincidiendo con la muerte del poeta Miguel Hernández, el Consell declaró en 2017 el 28 de Marzo como el día de las víctimas de la Guerra Civil y del franquismo. Y, acompañando de esta efeméride, Xàtiva acogió este martes la inauguración de la escultura «En defensa de la vida», obra de la artista Inmaculada Abarca. Se trata de una estructura en acero corten que tiene en sus bases un conjunto de siete rostros anónimos, que representan a las víctimas de la contienda bélica que arrasó España. «No son de nadie en concreto, es una manera de recuperar sus rostros y devolverles la dignidad. Si buscas los nombres en Internet no encuentras fotos y los archivos muchos años estuvieron ocultos. El desconocimiento ha hecho mucho daño. Si las cosas no tienen nombre desaparecen, nadie las recuerda».
Por ello, junto a la base de la escultura hay una serie de placas con los nombres de muchas víctimas. Jovino Fernández Díaz (Asturias, 1898), el último alcalde republicano de la ciudad, es uno de los que aparecen.
Abarca ha trabajado la estructura con un taller local:«Es un material diferente, que se oxida pronto y coge un color rojizo que va cambiando con el tiempo. El acero corten es muy utilizado en la construcción, por ejemplo».
La pieza se encuentra situada cerca de la Casa Blanca, escenario donde se perpetraron muchos asesinatos de represaliados de la Costera durante la dictadura por parte del bando franquista. Entre las 81 víctimas se encuentran vecinos de Xàtiva pero también otras localidades como Llocnou d'en Fenollet, Manuel, el Genovés, Gandía, Ontinyent, Beniatjar, Alcoy, Alcúdia de Crespins, Montesa, Vallada e incluso Sevilla.
La escultura, con una altura de unos 4 metros, está realizada en acero corten. Los rostros forman una especie de corona que responde al título de la obra, con ramas que parecen surgir de la tierra y establecen una relación de protección. El acto finalizó con la colocación de tres coronas de laurel a los pies de la estructura, así como numerosos ramos de flores.
Un nuevo espacio memorial para educar contra los delitos de odio
El acto del martes contó con la actuación de Miquel Gil y en él intervinieron la regidora de Memoria Histórica Raquel Caballero, la portavoz de los familiares homenajeados Ana Chàfer, el diputado de Memoria Histórica de la Diputación de València Ramiro Rivera y del alcalde de Xàtiva Roger Cerdà. «Xàtiva tiene desde hoy un nuevo espacio memorial, con una escultura que une arte y memoria, recordando las vidas de más de 80 personas injustamente asesinadas por la barbarie de una ideología totalitaria que extendió el terror más allá de la guerra», declaró Cerdà. el alcalde de Xàtiva Roger Cerdà, quien añadió que «los representantes públicos estamos obligados a educar sobre las causas, las consecuencias y la dinámica de los delitos de odio, así como a fortalecer la resiliencia de los jóvenes contra las ideologías totalitarias».
Espacio en el cementerio
Otro espacio para la memoria que también estará terminado en los próximos días es el de la escultura destinada al cementerio municipal para honrar a las personas que fueron fusiladas durante el franquismo y lanzadas a fosas comunes tanto en Xàtiva (a raíz del bombardeo de la estación y después de la guerra), como en Paterna.
Esta segunda escultura también cuenta con una alegoría vegetal y se titula «Sempre viva», haciendo alusión al surgimiento de una flor que se mantiene siempre viva a pesar de estar seca, para poder seguir creciendo.