Ontinyent expropia siete fincas para regenerar el barrio histórico de la Vila

La actuación abarca construcciones en ruinas y parcelas de las calles Roses, Callarías y Trinitat en el marco de los planes para esponjar la zona, crear nuevas viviendas, evitar desprendimientos y poner en valor la muralla

Casa a expropiar en la calle Callarís, 4 de Ontinyent.

Casa a expropiar en la calle Callarís, 4 de Ontinyent.

El Ayuntamiento de Ontinyent ha activado lo trámites para expropiar siete fincas privadas que comprenden diversos inmuebles en ruinas y solares destinados a uso residencial en un ámbito de 2.145 metros cuadrados del Plan Especial de reforma interior de la Vila, donde está pendiente de ejecutarse desde 2009 una inversión de 3 millones de euros de la Generalitat para la regeneración y revitalización de este histórico barrio de la ciudad.

Los bienes incluidos en el proceso de expropiación se ubican en las calles Roses, Callarís y Trinitat, donde recientemente se han producido diferentes desprendimientos y derrumbes por el abandono de viviendas en mal estado.

Una de las edificaciones expropiar es la que se derrumbó en la calle Roses hace un año

Este es el caso del número 3 de la calle Roses, cuya fachada se desplomó sobre la vía pública hace un año, despertado las alarmas por la peligrosidad de determinadas edificaciones en este ámbito cuando se producen lluvias. Tres de las fincas a expropiar se corresponden con cada una de las tres plantas de la citada construcción, divididas al pertenecer a un total de cinco propietarios distintos. Los justiprecios valorados por el consistorio por separado oscilan entre los 1.163 euros y los 1.938 euros, según el piso del que se trate.

El objetivo final de la actuación con fondos autonómicos, que se ha retrasado en el tiempo por cuestiones burocráticas y por la obligación del consistorio de Ontinyent de adaptar su Plan General de Ordenación Urbana, consiste en la creación de 12 viviendas con precios asequibles en la Vila, cuyo proyecto se licitó en 2021. También se despejará y pondrá en valor la antigua muralla medieval que está proceso de recuperación, se creará un nuevo espacio ajardinado y se mejorará la accesibilidad en el barrio.

El ayuntamiento ha ido adquiriendo diversas casas en el entorno a falta de aquellas para las que resulta necesaria su expropiación. Ahora acaba de someterse a información pública una propuesta de tasación conjunta de las siete fincas afectadas, que pertenecen a once personas físicas y empresas. En ellas la corporación municipal plantea gastarse un total de 65.603 euros, en función de las tasaciones practicadas.

Un plan pendiente desde 1994

El Plan Especial de Reforma interior de la Vila de Ontinyent se aprobó en 1994 con la intención de crear una pequeña manzana trapecial, una plaza y una zona edificable con un jardín lineal junto a las murallas históricas. En 2009, el ayuntamiento y el antiguo Instituto Valenciano de la Vivienda (IVVSA) sellaron un convenio de colaboración para promover viviendas protegidas y para la reurbanización de este ámbito. Como consecuencia de la crisis, el Consell del PP desistió de ejecutar el acuerdo de renovación de la Vila, pero el consistorio acudió a los tribunales y el Tribunal Superior de Justicia le dio la razón, obligando a la Generalitat asumir los compromisos adquiridos.

En el marco de la actuación se contempla la expropiación de un edificio residencial de la calle Roses, 7 valorado en 32.809 euros que se acordó eliminar para permitir la restitución del tramo completo de muralla histórica, en proceso de recuperación y puesta en valor. Igualmente, se proyecta una plaza de tamaño reducido en el cruce de las calles Trinitat y Callarís. Una parte de las parcelas a expropiar se encuentran edificadas, aunque la mayoría están en situación de ruina física y dos inmuebles carecen de edificación a día de hoy.

Según las previsiones municipales, el plan de regeneración de la Vila presupuestado en 3 millones de euros podría completarse en cuestión de dos años.

Suscríbete para seguir leyendo