La depuradora de Canals concentra el 70% de los sobrecostes por contaminación de lodos

La excesiva presencia de metales pesados en los residuos de la EDAR de la Costera disparó en 2022 a 603.000 euros los gastos extra de explotación, cuando en el conjunto de las plantas valencianas el sobrecoste total fue de 891.959 €

La depuradora que comparten Canals y l'Alcúdia de Crespins.

La depuradora que comparten Canals y l'Alcúdia de Crespins. / AGUSTI PERALES IBORRA

Sergio Gómez

Sergio Gómez

La reiterada presencia de metales pesados en concentraciones superiores a las permitidas ocasionó en 2022 unos sobrecostes de 603.059 euros en la estación depuradora (EDAR) que comparten Canals y l'Alcúdia de Crespins por el tratamiento de sus lodos contaminantes, como consecuencia de los vertidos de las industrias de pieles y encurtidos de la zona. 

La última memoria de gestión publicada por la entidad autonómica encargada del saneamiento de aguas residuales (la Epsar) revela que esta instalación de la Costera concentró el año pasado casi el 70% de los sobrecostes generados por la gestión de residuos contaminantes en todas las depuradoras de la Comunitat Valenciana financiadas con cargo al canon de saneamiento que pagan los ayuntamientos y repercuten a los vecinos.

La Epsar recuerda la obligación de los ayuntamientos de sancionar a los productores responsables de las altas concentraciones de metales

En todo 2022 se detectó la presencia de metales pesados en los lodos de depuración de nueve Edar valencianas, lo que derivó en un gasto extra de explotación de 891.959 euros. Solo tres complejos registraron sobrecostes: el de Alfarrasí (25.943 euros), el de Ibi (262.957 euros) y el de Canals-Alcúdia, gestionado por la Comunidad de Usuarios de la Partida de Sagres, donde están integrados los ayuntamientos de ambas localidades.

La Epsar controla periódicamente los elementos químicos contenidos en los residuos que generan las depuradoras como el plomo, el cadmio, el zinc, el cobre, el cromo o el mercurio. La presencia de alguno de estos metales por encima del umbral establecido en el Real Decreto 1310/1990 impide la reutilización de los lodos en la agricultura y obliga a someterlos a un tratamiento posterior y a un destino que suponen un sobrecoste en la explotación de la planta.

La entidad pública de saneamiento informa periódicamente a los consistorios donde se detectan estas concentraciones excesivas para que extremen la vigilancia y obliguen a adoptar las medidas correctoras pertinentes, sancionando si fuera necesario a los productores de los residuos de acuerdo con sus ordenanzas de vertidos y la normativa autonómica.

La que mas alertas registra

Las depuradoras que fueron objeto de más comunicaciones y alertas relacionadas con esta cuestión fueron las de Canals-l'Alcúdia de Crespins y la de Ibi, ambas con 11 alertas cada una. En 2021, la estación de la Costera ya encabezó el número de requerimientos, con un total de 12. En la planta depuradora de la Pobla del Duc también se registraron nueve comunicaciones al ayuntamiento del municipio tras la detección de presencias elevadas de metales pesados en los lodos, mientras que la Comunidad de Usuarios de Vertidos de la Edar mancomunada entre Alfarrasí, l'Olleria y Montaverner también recibió un aviso por la misma razón.

En 2022, los ayuntamientos de Canals y l'Alcúdia de Crespins acordaron diseñar una respuesta común para buscar soluciones

En 2022, los ayuntamientos de Canals y l'Alcúdia de Crespins acordaron diseñar una respuesta común y reforzar los controles y sanciones para buscar soluciones a la carga contaminante que llega a la instalación y que acaba generando gastos extraordinarios que afectan a ambos municipios. L'Alcúdia ya endureció su ordenanza de vertidos hace unos años para castigar a los infractores, mientras que Canals también anunció hace un año que estaba ultimando la suya con el objetivo de paliar los vertidos contaminantes y los malos olores que periódicamente denuncian los vecinos. De momento, el texto no se ha publicado en el Boletín Oficial o en el portal de transparencia del consistorio.

Nuevas depuradoras en Estubeny, Navalón, la Pobla, Ràfol y Beniatjar

La memoria de la Epsar recoge la construcción de dos nuevas pequeñas depuradoras cuyo proyecto está en fase de redacción en la pedanía de Navalón y en Estubeny, así como una nueva estación de bombeo en Albaida. En 2022 se desplegaron trabajos de reforma de la EDAR de la Pobla de Duc y de construcción de las depuradoras de Ràfol de Salem y Beniatjar con un presupuesto global de casi 3,8 millones de euros millones de euros.

Por otra parte, las depuradoras de Canals y Xàtiva produjeron 152.824 kilovatios/hora de energía limpia tras la instalación de placas fotovoltaicas. La estación de Ontinyent dispone de un sistema de cogeneración para el aprovechamiento del biogás producido en el proceso de digestión anaerobia que generó 214.440 kilovatios al año de energía.

Suscríbete para seguir leyendo