DIMARTS MERCAT
Son unos pequeños hilitos

Son unos pequeños hilitos / Vicent Soriano
Vicent Soriano
Son unos pequeños hilitos que salen del barco con aspecto de plastilina…» y se quedó más ancho que largo, calificando de este modo el inicio de la terrible y espantosa crisis del Prestige que dejó las costas gallegas empapadas de chapapote, o si se quiere, normalizando el nombre, por el correcto asfalto o alquitrán. No se pretendía en absoluto asfaltar la playa o tal vez sí. Un conocido me sentenció hace unos años que él iría a bañarse a las playas cuando estas estuviesen alquitranadas y no llenas de arena incomoda que se mete entre los dedos de los pies. Contra gustos no hay nada escrito.
Aquel maldito alquitrán sentenció a los políticos gallegos que mandaban en aquellos momentos, por falsos, mentirosos, cínicos y cobardes. Nada nuevo bajo el sol comparado con los actuales y como están gestionando la nueva crisis de los pellets, esas bolitas cuya mayoría son micro plásticos (hasta 5 mm), aunque alguno de los llegados a Galicia podría ser ligeramente mayor. Se fabrican a partir del petróleo en diferentes industrias y están compuestos de polietileno, polipropileno, poliestireno, cloruro de polivinilo o resinas sintéticas. O sea, un menú ecológico de lo más apetecible, lleno de calorías y proteínas que entran por donde entran —en caso de ingestión— y salen por donde salen, que aquí tenemos soluciones para todo.
Las autoridades gallegas se ven ahora tan apuradas, después de haber negado la mayor, que ahora piden ayuda desesperada al gobierno, solicitando tal cantidad de elementos de tierra, mar y aire, que ríase usted de las guerras mundiales. Para este viaje no hacía falta tanta alforja, sino una corresponsabilidad de los causantes de este nuevo atentado ecológico y ponerse manos a la obra. Que nos estamos cargando el planeta es tan evidente como el dolor de barriga en caso de tragarse unos cuantos plastiquitos de estos.
O la estúpida controversia acontecida hace unos cuantos años ante la a aparición de miles de peces muertos en el río Albaida, concretamente en aquel lugar donde una parte pertenece a la gestión del Genovés y la otra a Xàtiva. Se hizo bueno aquel refrán de «entre todos la mataron y ella sola se murió». Nadie quería cargar con el muerto de lo que allí ocurrió. Se sabía el origen y procedencia de la mierda que llegó al Albaida, pero todo se arreglaba con una multa sin importancia y el lavado de responsabilidad de la Confederación Hidrográfica del Júcar que mandaba las soluciones a las dos entidades locales que se culpaban la una a la otra de no poder coto la mortandad.
Al fin y al cabo, eran miles de peces, de esos que se pescaban los domingos allá en l’Estret de les Aigües. Nada, una tontería sin importancia. Con tan poca importancia como se pretende hacer creer ahora, como si el mar fuese el vertedero sin fin de las barbaridades que se están haciendo con él. Total, ¿pequeños hilitos, y diminutas bolitas de plásticos que mal pueden hacer?. Los del pueblo llano son unos exagerados!!!
Suscríbete para seguir leyendo
- ¿Hasta qué día puede visitarse el 'cadafal' de la Ofrenda?
- La Fallera Mayor de València, Berta Peiró, cierra la Ofrenda a la Virgen de las Fallas de 2025
- Cuatro heridos, uno de gravedad, tras estallar un trueno de aviso en la cremà infantil de Zapadores
- Sigue en directo la cremà de las Fallas 2025
- Durísima cogida a Borja Jiménez en la Feria de Fallas delante del Rey
- La Ofrenda más desapacible sale adelante entre la épica y las lágrimas
- Búscate en el segundo día de la Ofrenda a la Virgen
- El rey Felipe VI visita la plaza de toros de València por primera vez