Condenan a pagar 45.000 € a un ciclista herido por el mal estado de la CV-610 en Llutxent

La sentencia obliga a la Generalitat a indemnizar a la víctima tras cuestionar la ubicación de un badén reductor de velocidad en el que quedó encajada la bici en un trazado con escasa seguridad

El accidente tuvo lugar en la carretera CV-610 en sentido de Llutxent a Benicolet.

El accidente tuvo lugar en la carretera CV-610 en sentido de Llutxent a Benicolet. / Google Maps

Sergio Gómez

Sergio Gómez

El Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) ha condenado a la Generalitat a indemnizar con casi 45.000 euros a un ciclista que sufrió una grave caída en 2019 cuando circulaba por la carretera CV-610 de Llutxent a Benicolet, cerca del punto donde otro ciclista murió en agosto pasado tras ser arrollado por un coche.

La sentencia responsabiliza a la Conselleria de Infraestructuras y Territorio de las deficiencias del trazado. El ciclista denunció que cayó al suelo debido al mal estado del pavimento en el lateral derecho del reductor de velocidad tipo cojín-berlinés sobre el que tuvo que pasar, al no existir un arcén transitable por dicha carretera.

La sala de lo contencioso del TSJCV cuestiona la idoneidad de la ubicación del citado badén, recordando que la normativa técnica prohíbe su establecimiento en tramos de la red que no tengan la consideración de travesías.

El atestado redactado por la Guardia Civil describe el lugar del accidente del ciclista como una carretera convencional-travesía, con pendiente descendente del 2,5%, dos carriles de circulación y, al margen derecho, una cuneta de hormigón. Sin embargo, la sala de magistrados observa que el reductor de velocidad "fue instalado en un punto de la vía ciertamente alejado del casco urbano, sin que se observe la presencia próxima de instalaciones, parques o cualesquiera otras, que aconsejen mantener la reducción de velocidad más allá del suelo urbano". Además, en el caso del tramo de Llutxent, un gran árbol cuya sombra recae sobre el badén -ya retirado de la carretera- mermaba la visibilidad del mismo, junto con otros elementos que elevaban la peligrosidad.

A todo ello, la resolución judicial añade el hecho de que no existe un arcén en la vía. En ese sentido, el pronunciamiento señala que "no hay espacio para el paso de la bicicleta, ni arcén alternativo al carril, de modo que el conductor no pudo realizar maniobra evasiva, y cuando lo intentó, encajó la rueda en la muesca que tenía el propio badén, sufriendo la grave caída".

Desperfecto en el badén

En definitiva, el TSJCV sostiene que son varios los elementos que demuestran la responsabilidad de la administración titular de la vía, dado que la travesía "no ha sido transferida al municipio de Llutxent" y el propio badén registraba un desperfecto que fue "determinante en la grave caída".

El ciclista accidentado en término de Llutxent que reclamó a la Generalitat la indemnización sufrió lesiones temporales valoradas en más de 18.000 euros y tuvo que someterse a intervenciones quirúrgicas, además de ser víctima de secuelas y perjuicios estéticos que mermaron su calidad de vida.

Como informó este diario, la CV- 610 que conecta la Vall d'Albaida y la Costera figura entre las tres carreteras con mayor siniestralidad de las comarcas de la Costera, la Canal y la Vall d'Albaida. Durante los años se han sucedido los anuncios de inversiones en el trazado, sin que hasta el momento se hayan materializado grandes obras de calado en el tramo señalado para mejorar la seguridad.

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