"Compro casa": proliferan los mensajes de compraventa encubiertos en municipios de la Costera y la Vall d'Albaida
La presencia de carteles en los que no se identifica el autor o en los que solo se pone un nombre de pila y un teléfono se detecta en Ontinyent, l'Olleria, Albaida, Canals o l'Alcúdia de Crespins

Proliferan los mensajes de compraventa encubiertos en municipios de la Costera y la Vall d'Albaida / Levante-EMV
El mercado de compraventa de viviendas está viviendo un momento álgido. Los precios no hacen otra cosa que subir y la alta demanda está causando que la oferta se quede corta. El sector inmobiliario vive tensionado y los expertos no saben cómo acabará la cosa. Esta dinámica ha causado que en municipios de las comarcas de la Costera y la Vall d'Albaida se haya identificado la presencia de mensajes de compraventa encubiertos, donde solamente se pone un número de teléfono -y un nombre de pila en el mejor de los casos- y no se identifica claramente el receptor de la información. Es una práctica que desde hace tiempo se lleva ejecutando en grandes ciudades como València. Y, tal y como ocurre con los vasos comunicantes, la situación ha llegado a las zonas de interior de la provincia de València.
Así, en las últimas semanas se ha identificado la presencia de estos carteles -al menos- en las localidades de Ontinyent, L'Olleria, Albaida, Canals y l'Alcúdia de Crespins. Sorprende que Xàtiva -la otra capital comarcal- se haya librado. Al menos, de momento. Los viandantes se encuentran con carteles escritos a mano -de forma aparente- en los que se informa sobre una persona interesada en comprar un piso en una zona concreta. En todos los casos hay un móvil y en algunos un nombre de pila. No hay ningún otro elemento identificativo. Son carteles alejados de las tarjetas corporativos o folletos de las inmobiliarias de toda la vida.
Pepe Garrigós, exalcalde de l'Alcúdia de Crespins, se ha hecho eco de la problemática en redes sociales. Así, ha compartido una publicación en la que se alerta sobre estas prácticas: "Que lleguen estos carteles a tu pueblo es preocupante, pero si queremos evitar que pase lo mismo que en muchos barrios de diferentes ciudades arranca el cartel y a reciclar. El barrio y el tejido social se cuida entre vecinos y vecinas", reza el mensaje compartido.
Los propios agentes del sector son conscientes de lo que ocurre. Salvador Palau es el gerente de Kapitalia Inmobiliaria. Ayer atendió a Levante-EMV y confirmó que es un escenario que ya han identificado: "Tenemos oficinas en Xàtiva y Ontinyent. En la capital de la Costera no hemos visto estos carteles, pero en la de la Vall d'Albaida sí. Yo resumiría las posibilidades en tres opciones: los publica una empresa para tener información privilegiada sin identificarse, se trata de una particular interesado en una compra o, en el peor de los casos, hablamos de una presunta red de okupación buscando objetivos".
"Los protagonizados por redes de okupación y particulares son casos que se ven mucho menos. En la gran mayoría hablamos de inmobiliarias que siguen prácticas dudosas. Utilizan los carteles para tener información privilegiada. No podemos esconder que durante años se han seguido prácticas muy malas en el sector, se han hecho auténticas barbaridades. Hay gente reacia a tratar con inmobiliarias y gente que tiene pisos a la venta. No está muy claro que lo hagan sin identificarse. Pueden ser personas que cogen los datos y luego los pasan a las firmas. Incluso, hay algunas sociedades que vienen de fuera, cuelgan los carteles y se van", prosiguió Palau.
Pisos vendidos en un mismo día
Consultado sobre el momento que vive el sector, el responsable de la agencia explicó que "el mercado inmobiliario está a punto de reventar. No hay pisos para cubrir la demanda. Los que están bien y se sacan a un precio correcto se venden en horas. El otro día tasamos un piso por la mañana, por la tarde se hicieron cuatro visitas y ese mismo día se señalizó. No llegamos ni a ponerlo en internet", expuso.
De hecho, en ciudades como Ontinyent también hay carteles de venta de pisos en los que se detallan características, pero el lector no sabe quién los publica. Es la práctica anterior, pero a la inversa.
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