Tercera edición del Arenal Sound de Burriana, y primera en la que la organización hace un balance de lo ocurrido, como en los grandes eventos. El director del festival, David Sánchez, el alcalde de Burriana, José Ramón Calpe, y la edil de festivales, Ana Montagut, fueron los encargados de dar ayer las cifras, y que se sitúan con 54.000 asistentes diarios, lo que supone la mayor subida de un festival a nivel nacional -un 38,4 por ciento-. Así,

El Arenal Sound ha batido todos los récords este año, colgando el cartel de "no hay entradas" una semana antes de su celebración. No obstante, el temor recae ahora en la subida del impuesto sobre el valor añadido (IVA) que, según palabras de Sánchez, es "insostenible" que se repercuta en el usuario, por lo que estudiarán la manera de que afecte lo menos posible. En cuanto al impacto económico, se confirmará en los próximos días tras la contratación de una consultora.

La única pega, reconocida por el director del festival, fue la mañana de colas y lipotimias que tuvieron que soportar los sounders para sacar su pulsera. Miles de asistentes se congregaron en el paseo marítimo, y aunque en casi dos horas se pusieron hasta 6.000 pulseras, la llegada de los bomberos para refrescar a la gente que llevaba hasta 23 horas en la cola fue determinante. El primer día de festival se registraron 26.000 acreditaciones, y en la segunda jornada, ya eran 37.000 pulseras repartidas. El resto de sounders llegó durante los días de festival.

"Con independencia de los errores y con las mejoras que año a año vamos haciendo, como en cada proyecto, es que hemos pasado de 39.000 asistentes a 54.000, destacó el también codirector del Viñarock. Sánchez añadió que "cuando la gente vuelve, por algo es, lo que la gente recibe para el precio que paga está por encima de sus expectativas, de lo contrario, no volverían".

Este año se ha invertido un 40 % más en infraestructuras y servicios, los cámpings están "perfectos" y hay duchas suficientes, servicio de limpieza de 24 horas y se ha reforzado los baños, muchos de los cuales se han conectado a la red, según dijo el director tras las críticas en estos aspectos de la pasada edición. "En la próxima -afirmó el responsable del Arenal- se fomentará la llegada en autobús y transporte público para evitar que todos los asistentes lleguen en sus coches el primer día de forma masiva.

El Arenal no tiene "techo", afirmó Sánchez, éste lo pondrán las infraestructuras y la voluntad de los sounders. David Sánchez aseguró que su intención es continuar en Burriana, porque el ayuntamiento, la Diputación de Castelló y la administración valenciana "están encantados", y el festival "está pensado para esta ubicación". El director del Arenal terminó ayer su comparecencia ante los medios asegurando que "no hay obsesión por crecer, vamos a hacerlo con calidad y asegurándonos de que la estancia sea confortable".

Las últimas actuaciones revientan el escenario

Punto final. Ayer se terminó la tercera edición del Arenal Sound con los "sounders" flojeando y las ojeras difíciles de disimular. Corizonas fueron los encargados ayer de abrir por última vez el escenario principal. Buena música. Eso es lo que esperaban los miles de "sounders", que no quisieron perderse uno de los mejores directos del festival para ver música de la buena, y producto nacional. En la noche de antes, los protagonistas fueron los irlandeses Two Door Cinema Club y Lori Meyers. Los doce miembros de Kamadafakka mostraron intensidad, descaro y buenas canciones venidas desde Noruega. Fue sin duda un concierto intenso donde repasaron su primer y exitoso disco, y sin duda una hora y cuarto que no olvidaran nunca ni ellos ni muchos de los asistentes.