Los diestros Enrique Ponce y Curro Díaz salieron a hombros en la corrida que inauguró el pasado martes la Feria de San Agustín en Linares (Jaén), donde se conmemoraba el 65 aniversario de la muerte de Manolete.

Al final del paseíllo, se guardó un minuto de silencio para recordar la muerte de Manolete en el mismo ruedo hace ahora 65 años. Los toros eran de Santiago Domecq, salvo el quinto, que era del hierro de Ana María Bohórquez. Todos fueron desrazados y deslucidos, con la excepción del cuarto. Enrique Ponce se llevó una ovación en el primero de su lote y dos orejas tras dos avisos en el segundo. Por su parte, Curro Díaz consiguió oreja en ambos astados a los que se enfrentó.

El Fandi, que cerraba la terna de esta corrida especial, saldó su presencia en Linares con una oreja en el primero y ovación después tras leve petición de premio.