El campus en Valencia del Berklee College of Music arranca el curso 2012-2013 con más de un centenar de alumnos de 29 países y el objetivo de consolidarse como "un laboratorio" en el que se cree "una nueva música" y se formen los "líderes musicales del futuro".

Así se destacó en el acto de apertura de curso que ayer se celebró en el Aula Magistral del Palau de les Arts -que alberga en su anexo sur las instalaciones de la institución educativa-. A la ceremonia asistieron, entre otros, el jefe del Consell, Alberto Fabra; el presidente de las Corts, Juan Cotino; el presidente de Berklee College, Roger Brown; los consellers María José Català, Lola Johnson y Serafín Castellano, y el rector de la Politécnica, Juan Juliá.

Brown dio lectura a una poética historia sobre la evolución de la música que fue salpicada por la actuación de jóvenes. Con esta "lección-performance", Berklee -que ha elegido Valencia para su única sede fuera de Boston- quiso reflejar que su campus va a convertirse en una "destilería artística" en la que fusionar los ritmos del Mediterráneo, Asia, América y África. "No es un conservatorio, es un laboratorio", aseveró.

El director ejecutivo de la entidad en Valencia, Guillermo Cisneros, recordó que la universidad "no ha escatimado recursos" -lleva invertidos más de 6 millones de euros en su campus, en el que trabaja un equipo de 55 personas- y "no va a bajar la guardia". Asimismo, auguró que dentro de tres años se prevé que Berklee Valencia esté "a pleno rendimiento y consolidado como un centro de excelencia mundial".

En un principio estaba previsto que la institución se ubicara en una construcción nueva (la Torre de la Música), que, debido a razones económicas y a los problemas en la Sociedad de Autores (SGAE), no se ha llevado a término. Brown dijo ayer que están "encantados en el Palau de les Arts", puesto que las instalaciones actuales están en el "centro de la actividad musical" de Valencia. Actualmente, son 109 alumnos los que cursan ya a tiempo completo sus estudios en el campus valenciano.