Después de 15 días en el hospital Arnau de Vilanova, fallecía el día 22 de septiembre de 2012, a las 1.05 horas de la madrugada, el famoso dibujante y escritor de la Escuela Valenciana Leopoldo Ortiz Moya, nacido en Cartagena el 11 de septiembre de 1930.

Después de una infancia marcada por la postguerra española, en 1953, junto a su no menos famoso dibujante José Ortiz, realizaron el serial Príncipe Pablo, un año antes los dos hermanos se habían desplazado a Valencia, donde continuaron cada uno por su lado su carrera, de modo que mientras Leopoldo dibujaba y argumentaba la serie Terciopelo negro, hacía los guiones para su hermano José en una serie muy apreciada por crítica y público, Dan Barry, el terremoto.

Estuvo un tiempo en su Cartagena natal, en donde se casó y volvió a Valencia para permanecer hasta el fin de sus días. En 1955 realizó guión y dibujos suyos, para la Editorial Maga, las historias de Carlos de Alcántara. 1958 serían las series Audaces legionarios y, al poco, El caballero de la rosa. Para muchos críticos y lectores su mejor obra fue Bengala, dándole un aire favorable a los nativos de la India en la época de los años1945-50, en lucha con los británicos colonialistas.

El libertador fue otra serie en donde brilló como dibujante, en ese año de 1965, no firmaría, y ha sido, hasta hace unos años, atribuido su trabajo a varios ilustradores. Por aquel tiempo, Leopoldo, persona con gran talento artístico nato, de estilo vigoroso, realista, suelto, rico en detalle de línea fina, sería la muestra de las excelencias de la llamada Escuela Valencia, que había iniciado Manuel Gago, en 1943, es decir grafismo enérgico, dinamismo, movimiento y argumentos con acción y diálogos armoniosos.

Formó junto a su hermano José y otros conocidos artistas, tales como Luis Bermejo (alumno de M. Gago) y excelente, después, como un alto valor, al igual que Miguel Quesada, destacando en su propio estudio como de lo más notable de esta tercera generación de la nombrada escuela. Fue siempre muy exigente consigo mismo y con los demás, fuerte carácter y sincero a la par que humilde. A partir de 1965 se dedica a la publicidad y a realizar trabajos para Inglaterra, al tiempo que formó parte del equipo de las revistas publicadas en Valencia: Metropol y K. O. Para terminar dedicándose tan sólo a la publicidad.

La grandeza de su arte no ha sido lo suficientemente destacada debido a su mismo carácter introvertido y evasivo ante la falsedad publicitaria del medio.