Tres piezas de bronce del escultor Octavio Vicent han sido salvadas de su destrucción. La intervención del grupo de Medioambiente de la Policía de la Generalitat evitó que las obras acabaran en una función, su destino final.
La policía requisaba la pasada semana de una chatarrería de Valencia las tres obras: dos relieves de casi cincuenta centímetros de ancho y alto y una escultura de un tamaño muy similar. Las piezas se encontraban en perfecto estado.
Según fuentes del grupo de Medioambiente su descubrimiento fue casual ya que se produjo durante una de las inspecciones habituales que se realizan a espacios de almacenamiento de residuos peligrosos.
Las tres piezas llamaron la atención de los agentes que al observarlas vieron que estaban firmadas con el nombre de Octavio Vicent.
Las explicaciones de los responsables del establecimiento llamaron además la atención de los agentes ya que estos aseguraron que desconocían a quienes se las habían comprado y que todo el material almacenado junto a ellas tenía como destino la fundición.
Sin embargo, a la policía le extrañó también que tratándose de obras de arte hubiera sido compradas a peso y ahora fueran a ser destruidas.
"Las explicaciones que nos dieron no fueron satisfactoria, así que decidimos mantener la investigación y requisar las piezas", manifestaban ayer fuentes de la investigación.
Los dos relieves está numerados sobre una tirada de 76 piezas, y aunque su actual valor de mercado no sea muy elevado-recientemente salían a subasta una copia similar a un precio de salida de 800 euros-al menos sí tiene un valor artístico lo suficientemente importante. Las dos piezas representan alegorías musicales, mientras que la escultura de pie reproduce a una valenciana con una canastilla.
La policía de la Generalitat mantiene el caso abierto y judicializará la investigación para poder determinar su procedencia, que calificaron de "oscura". Las mismas fuentes recordaban que en caso de haber aparecido en un anticuario no habría generado tantas dudas, pero sí resultaba sospechoso haberlas encontrado en una chatarrería. La Generalitat, en caso de no encontrar a su propietario ya sea producto de una venta o de un robo, será la que determine el destino de las tres piezas.
Octavio Vicente (1913 -1999) fue junto a Silvestre de Edeta y Esteve Edo uno de los escultores renovadores de la escultura realista y pública valenciana tras la posguerra.
Catedrático de modelado al natural de la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos y posterior académico de la institución, su obra, tanto en piedra como en bronce, está ampliamente representada en Valencia. Además de ser autor del Monumento al Maestro Serrano, ubicado en la avenida de Antiguo Reino, lo es también de la fontana de la plaza del Patriarca y del Monumento a Fray Pedro Ponce de León, del puente de San José o el del Arzobispo Olaechea, ubicado en la plaza del Arzobispo. Tiene otras obras en Viveros y realizó piezas de imaginería.
