Continuó la feria taurina de Algemesí con una novillada picada con participación de dos de los espadas mas relevantes de la grey novilleril. La feria sigue desarrollándose con un magnífico ambiente en los tendidos del palenque algemesinense, y gozando de una climatología espléndida.
Ayer se lidiaron utreros de la ganadería de Santiago Domecq. Compusieron un lote de buena presentación, con lustre y cuajo de toros. Y, para no perder la tónica de lo que va de feria, ofrecieron un juego más que notable. Noble aunque apagado el primero, excelente por su calidad y son el colorado segundo, le costó algo más al también colorado tercero y pastueño y coloborador fue el cuarto.
El extremeño José Garrido, a quien apodera el matador de toros Rivera Ordóñez, es el actual líder del escalafón. Y lo justificó con creces. Se mostró como un torero enterado y con oficio. Buen muletero, con sentido del temple y la colocación, sus dos faenas mostraron a un coletudo seguro, sobrado de autoridad y capacidad, con tanto aplomo como firmeza.Y un muy buen estoqueador. El sevillano Lama de Góngora es un espada con un excelente corte de torero. Plástica, estética y expresión no le sobran, aunque en su debe hay que poner un jus to ánimo. No terminó de estar a la altura del excelente segundo, en una labor vistosa aunque algo crispada, y tampoco acabó de cruzarse en su pinturera y afanosa faena al cierraplaza.
