El cuadro de Joaquín Sorolla "La Llegada de la pesca" se vendió este miércoles en Londres por 224.805 euros en una subasta en Sotheby's que no halló comprador, en cambio, para otras dos obras del pintor español.

"La llegada de la pesca" (1898), que describe una escena en la que pescadores y mujeres rodean un barco que acaba de atracar en una playa valenciana con la captura del día, "fue adquirido por teléfono por un comprador privado europeo", dijo a Efe un portavoz de la casa de subastas, sin revelar más detalles.

El dinero pagado por la obra se ajustó a las estimaciones de Sotheby's, que había fijado su precio de salida entre 180.000 y 300.000 euros.

En cambio, durante la puja dedicada a la "Pintura europea del siglo XIX", se quedaron sin comprador otros dos "sorollas" que tenían precios de salida más altos.

Uno de ellos fue "Playa de Valencia" (1910), cuyo precio de salida era el más elevado de los tres -entre 834.000 a 1,1 millones de euros-, que se sitúa en el verano de 1910 en la playa de El Cabañal y también refleja el ambiente de los pescadores cuando descargaban lo que habían pescado.

El otro cuadro que no logró comprador fue "Barcas en la playa" (1894), en el que Sorolla presenta dos barcos en la orilla de una playa valenciana, en un guiño al orgullo por su ciudad y al oficio de pescador, vital para el bienestar de la zona.

"Playa de Valencia" y otro "sorolla" vendido el pasado día 8 en Nueva York por 4,8 millones de dólares (3,5 millones de euros), "Buscando Mariscos" (1907), fueron exhibidos juntos en EEUU en 1911.

Entonces "Playa de Valencia" fue adquirida por el filántropo y empresario Frederick Forrest Peabody en Chicago, mientras "Buscando Mariscos" fue comprada probablemente en 1912 o 1913 por Joseph Pulitzer II, en San Luis, según Sotheby's.

Los cuatro "sorollas", pintados por el artista español entre finales del siglo XIX y principios del XX, fueron expuestos en Madrid el pasado octubre y tienen como temática común la playa de Valencia, ciudad donde nació el pintor en 1863.

Sorolla estableció un sólido vínculo con EEUU en 1909 cuando llevó más de 350 cuadros a Nueva York con motivo de una exposición de la Sociedad Hispánica, que fue visitada por unas 170.000 personas.