El escenario del Olympia estrenó ayer el espectáculo, Aladín, un musical genial, un cierre de temporada para el teatro valenciano que se mantendrá en cartel hasta el 3 de agosto. Momentos antes del estreno, el director del montaje, José Tomás Cháfer, comentaba que «Aladín no es un musical al uso para niños. Hemos querido hacer un espectáculo que interese a los niños, porque se meten en la historia, y distraiga a los adultos, porque lo que ven les resulta atractivo. Es un ambicioso montaje, un riesgo que hemos corrido por su envergadura, ya que pienso que el teatro musical debe conservar su magnitud aunque se trate de un espectáculo familiar», confesó Tomás.

El director subrayó la ilusión por representar este Aladín en Valencia, «donde celebraremos las 100 representaciones, porque lo hemos puesto en Madrid y otras ciudades y no aquí, siendo una producción totalmente valenciana. Se ha hecho una buena promoción y la venta anticipada funciona muy bien», declaró.

El actor valenciano Carles Montoliu interpreta a varios personajes en este musical, pero «el que más impacta a los niños y a los mayores es el del genio, tal vez porque en esta época son necesarios los deseos, ya que las gentes necesitan creer en algo positivo. Por otra parte, los deseos suponen ilusión, y es muy importante recuperar la ilusión» manifestó.

Montoliu ya había hecho teatro infantil en el Escalante. «Los niños solo se entusiasman si lo que ven les impacta. Yo he cantado en otras ocasiones, aunque no soy joven ni guapo. Pero la música que más me gusta, la que me emociona, es la de las risas. Me suena a música celestial», confesó.

Adrián Salzedo y Erika Bleda se encargan de representar al propio Aladín y a la princesa Jasmín. Ambos se mostraban ayer encantados con sus papeles. Adrián confesó no haberse fijado en el Aladin de Disney. «He creado mi propio personaje y le he dado otra dimensión. Ha sido todo un logro representar este musical».