Cambio de leyes, reglamentos y hasta un nombramiento como alto cargo de la Generalitat han tenido que ser necesarios para que la situación del actual director del Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM), José Miguel G. Cortés, pudiera ser regularizada. De no ser así, incluso el IVAM podría estar en la actualidad sin responsable directo, apenas seis meses después de que fuera resuelto Cortés ganador del concurso público convocado para ocupar la plaza y apenas seis de acceder al cargo.
Y es que la Universidad Politécnica de Valencia no reconoce el cargo de director del IVAM lo suficiente como para que uno de sus trabajadores pueda acogerse a una excedencia temporal y gozar de una comisión de servicios. La dirección del IVAM no es un alto cargo para la universidad. De ahí el lío administrativo que estos días ha podido ser resuelto.
De hecho, el nombramiento de José Miguel G. Cortés como director del IVAM se publicaba ayer mediante decreto en el Diari Oficial de la Comunitat Valenciana (DOCV), después de que el pasado viernes se aprobara el Reglamento de Organización y Funcionamiento del museo que obliga a publicar este mismo nombramiento. Es la primera vez en la historia del IVAM que un director ha sido nombrado dos veces.
La situación ha sido realmente rocambolesca. Otros anteriores directores del IVAM vinculados también al ámbito universitario no necesitaron de tanto papeleo administrativo.
El pasado viernes el Consell aprobó el primer Reglamento de Organización y Funcionamiento del IVAM, exigido por la Ley de Reestructuración del Sector Público Empresarial de la Generalitat, que sí establece la obligatoriedad de publicar en el Diari Oficial este nombramiento. Cortés es profesor de Teoría del Arte en la Facultad de Bellas Artes de Valencia.
Fuentes de la Generalitat reconocían ayer que aunque se haya dado esta paradoja y el nombramiento haya sido por decreto, no afecta a todas las decisiones administrativas adoptadas en su momento por Cortés en el museo valenciano ni se encontraba, por tanto, en una situación de alegalidad.
De hecho, según la Ley de Creación del IVAM, el director del museo ha de ser elegido por el Consejo Rector del centro a propuesta del presidente/a del mismo, en este caso la actual consellera de Cultura María José Català. Sin bien el Consejo Rector estaba en el pasado ocupado por representantes de la Administración autonómica y representantes del mundo del arte, en la actualidad el control del mismo es absolutamente político ya que en él figuran altos cargos de diferentes consellerías.
El caso se añade a una singular lista de situaciones que ha vivido el IVAM desde la llegada de Cortés y que empezó con la imposibilidad de poder contratar a parte del equipo con que Cortés esperaba contar en el IVAM. Más tarde se produjo la gran bronca por la retirada de la sala permanente de Miquel Navarro o la cancelación del programa de exposiciones heredado. Ahora se suma este trámite que a punto ha estado de dejar al IVAM sin director.
