El tiempo es circular, puede pensar hoy Juan Vicente Martínez Luciano. El profesor y traductor teatral fue el último director de Teatres de la Generalitat antes de la década de Inmaculada Gil Lázaro. Lo nombró Esteban González Pons en febrero 2004, durante su breve estancia en la conselleria de la avenida de Campanar, y lo destituyó 16 meses después Alejandro Font de Mora.

Pérdida de confianza fue el argumento oficial. Unas semanas antes, en Alcoi, Martínez Luciano había firmado un documento del sector de las artes escénicas duro con la política cultural del Consell. Estaba sentenciado.

Cuando dejó su despacho en junio de 2005, Sagunt a Escena tenía como director a Salvador Bolta, designado por Martínez Luciano. El dramaturgo dimitió tres semanas después de la salida de quien había sido su mentor. Desde entonces, el festival no ha tenido un responsable artístico.

Hasta ahora. La Conselleria de Educación y Cultura, en manos de Vicent Marzà, anunció ayer que Martínez Luciano será el nuevo titular del certamen de verano. Por ahora, solo para la próxima edición, calificada como «de transición».

Por su parte, Bolta ha pactado su regreso también a Valencia como director del festival que las compañías de teatro y las salas privadas proyectan en junio en la ciudad.

En el tránsito de 2005 hasta aquí, Martínez Luciano y Bolta han alimentado su carrera con éxitos en Madrid. El primero, con adaptaciones de Pinter, Stoppard o Beckett. El segundo, con diversas producciones y el puesto de adjunto a la dirección del Centro Dramático Nacional (CDN).

El nombramiento ahora de Luciano supone un gesto además ante el sector de las artes escénicas, ansioso de un giro real en las políticas culturales y del que el profesor universitario es un compañero más.

Como publicó Levante-EMV, la Diputación de Valencia pasa a implicarse de pleno en el festival, que cofinanciará con parte de los 400.000 euros que Rosa Pérez logró para teatro en los presupuestos. La designación del nuevo director ha sido, así, «consensuada» por las tres instituciones ahora implicadas: Generalitat y Ayuntamiento de Sagunt son las otras.

El objetivo es lograr un acuerdo plurianual que dé estabilidad al certamen. Cultura habló de potenciarlo con una programación más amplia y variada que reporte prestigio. El esquema, no obstante, es similar al de los últimos años: compatibilizar los clásicos grecolatinos con una oferta más diversa. Habrá que ver en qué queda.