Toda película romántica que se precie comienza con un «chico conoce a chica» y acaba con un final feliz precedido por una serie de malentendidos que hace que la situación se tuerza durante unos 90 minutos. Sin embargo, ese no es exactamente el guion que ha utilizado Dídac Cervera para dirigir y escribir, junto a Joan Sanz, el filme Mil cosas que haría por ti, que estos días se sirve de los alrededores de Godella y el casco histórico de Valencia para retratar las «desventuras» de Dani y Mónica, una pareja joven que se ha visto anclada en la rutina tras cinco años de relación.
Esta circunstancia, tan actual como frecuente, es el reclamo del joven director catalán, que trata de hacer una llamada de atención para las parejas con más «antigüedad». «La situación que viven Dani y Mónica es más común de lo que puede parecer desde fuera. Considero que hay que cuidar mucho a la pareja, con tal de no entrar en rutinas que puedan dilapidar la relación», afirma este director que debuta en el campo del largometraje, ya que hasta ahora había dirigido 10 cortometrajes y la serie de televisión Marhaba emitida por XTVL.
Mil cosas que haría por ti, producida por Alhena Production, se estrenará en el Festival de Málaga, previsto entre el 17 y el 26 de marzo de 2017 Los actores Peter Vives (Dani) y Jordi Vilches han sido los primeros en llegar a Valencia para comenzar el rodaje, al que se sumará Iris Lezcano (Mónica), actriz que también participó en L´Alqueria Blanca en la extinta Canal 9, Carmen Barrios, madre del también actor Paco León, Jordi Vilches, Pep Cortés o Carles Sanjaime. «El rodaje va a ser muy divertido, ya que contamos con actores muy de comedia», asegura Cervera. A pesar que el rodaje se centrará en Godella y en el barrio de El Carme, el filme no se ambientará particularmente en Valencia, ya que el equipo trata de darle a la producción «un ambiente urbano, con tal de que cualquier espectador se pueda sentir identificado como su propia ciudad», explica el director.
Un error de Dani lo lleva a adentrarse en un terrible lío entre policías y cacos tras precipitar la ruptura con su pareja. Una situación absurda que hace relucir la verdadera seña de identidad de la producción: el surrealismo. «Nuestro principal referente a la hora de escribir el guion fue Luis García Berlanga, por el tipo de humor que desplegaba en sus películas», afirma el director, quien ha tomado como referencia la película La Vaquilla, donde el director valenciano narra la intención de un grupo de republicanos de desmoralizar a los falangistas robando una vaquilla que iba a ser la estrella de las fiestas populares de un pueblo del bando nacional.
«De él nos interesan los personajes que rayan los absurdo, como también ocurre en las películas de Woody Allen», apunta Cervera, quien además toma como referencia el filme Granujas de medio pelo del director estadounidense, ya que este suele centrar sus comedias en las relaciones de pareja y con personajes neuróticos y poco hábiles.
La comedia española, en racha
Es un buen momento para la comedia nacional. O al menos es lo que dicen algunos productores que han visto aumentar la financiación para este formato tras el éxito de Ocho apellidos vascos o Tres bodas de más. El secreto reside en gran medida en el grado de identificación, tanto en el humor como en los escenarios y las situaciones. Cervera es consciente de ello, por lo que no ha dudado en tomar como referencia las obras de Berlanga para emprender este nuevo reto en su carrera cinematográfica.
«El triunfo de una producción se basa en una mezcla entre la suerte y estar en el momento idóneo. Y para conseguirlo no se debe aceptar nunca un ´no´ por respuesta. Hay que perseverar hasta que encuentres a una persona que haga convertir ese ´no´ en ´sí´», afirma el joven director.
