El equipo legal de Roman Polanski ha puesto en marcha un nuevo intento por resolver el caso de violación de 1977 para que pueda volver a Estados Unidos sin tener que cumplir ninguna condena de prisión.

Harland Braun, el abogado de Los Ángeles del director ganador de un Oscar, ha asegurado este jueves que Polanski desea volver a viajar libremente y visitar la tumba de su esposa Sharon Tate, que fue asesinada por la familia Manson en 1969.

En 1977, Polanski se declaró culpable por tener relaciones sexuales con una niña de 13 años y cumplió una condena de 42 días tras un acuerdo con el fiscal, pero huyó de Estados Unidos por miedo a que el acuerdo se anulara y tuviera que volver a la cárcel.

Braun ha pedido al juez del Tribunal Superior de Los Ángeles, Scott Gordon, que desprecintara el testimonio del fiscal sobre el caso de 1977, lo que demostraría que Polanski llegó a un acuerdo y, por lo tanto, no debe volver a la cárcel.

"Ahora ha sido determinado judicialmente que Roman no debe más años de custodia. Por eso, si el fiscal del distrito de Los Ángeles y el Tribunal reconocen esta decisión, podría volver a Los Ángeles para terminar con el caso sin miedo a ser enviado a la cárcel", ha asegurado Braun.

La víctima del caso, Samantha Geimer, ha dejado claro que para ella el autoexilio de Polanski ha sido un castigo suficiente.

La carrera cinematográfica de Polanski ha prosperado a pesar del caso de violación. En 2002, ganó un Oscar por dirigir la película 'El pianista', pero no viajó a Estados Unidos para recoger el premio.