Las descomunales esculturas de Manuel Valdés ya se encuentran en la Ciutat de les Arts i les Ciències (Cacsa). A dos días de que se inaugure la exposición que la Fundación Hortensia Herrero ha traído a València desde la plaza Vêndome de París, los operarios ultiman hoy la instalación de las seis esculturas en el lago artificial de Cacsa -el que se encuentra entre el Umbracle y el Museu de les Ciències-, en el que permanecerán hasta el 10 de diciembre. Las tareas de instalación se extendieron durante toda la jornada de ayer, debido al peso de las piezas.

Estas obras de más de 5 metros de altura son La Mariposa, Los Aretes, La Diadema, Mariposas, La Doble Imagen y La Pamela, y están compuestas de diversos materiales como el acero cortén, aluminio, hierro fundido o mármol. Las piezas fueron creadas para la muestra de París, y están inspiradas en objetos cotidianos que también beben de la tradición de la pintura española y de la historia del arte en general. Son seis grandes cabezas con mariposas, formas geométricas o una pamela.

Hace algunas semanas, la Fundación Hortensia Herrero anunció que adquiriría una de las esculturas instaladas en el lago para ser cedida después a la ciudad. La pieza será escogida por votación popular a través de urnas instaladas en la misma exposición. La seleccionada se colocará junto a la Marina de Empresas, donde se ubica La Escuela de Empresarios y lanzadera que impulsa Juan Roig. «Para mí es una enorme satisfacción ayudar a traer a València esta exposición. Manuel Valdés es uno de los artistas valencianos más importantes y nuestro creador más internacional y ver estas seis esculturas durante unos meses en la Ciutat de les Arts i les Ciències va a ser un verdadero espectáculo», explicó Hortensia Herrero tras hacerse público el traslado de la muestra a València. «Me gustaría que algo de esta exposición se quedara para siempre en València», añadió.

La más «popular» de Cacsa será la segunda escultura de Valdés instalada en la ciudad, ya que la primera fue La Dama Ibérica, la escultura inaugurada en 2007 en la rotonda donde confluyen la avenida de las Corts Valencianes y la calle de la Safor. La espectacularidad de la dama valenciana de Valdés será difícil de superar, pues se compone de 22.000 pequeñas piezas de gres porcelánico (creadas por el artista valenciano Manuel Martín) y está valorada en 2,4 millones de euros.

La instalación de estas obras en Cacsa es el inicio de un diálogo artístico entre dos de los valencianos con más proyección internacional del panorama actual, como son el propio Valdés y Santiago Calatrava. El arquitecto de Benimàmet se encuentra actualmente inmerso en uno de los proyectos más ambiciosos de su carrera: el plan de transformación de la Península de Greenwich de Londres, valorado en 1.200 millones de euros.

La obra de Manolo Valdés (València, 1942) forma parte de la colección permanente de museos tan destacados como el Metropolitan de Nueva York, el Centro Pompidou de París, el Museo de Bellas Artes de Boston, el de Houston, el National Art Museum de Pekín, el Museo de Israel, el MOMA de Nueva York, la Hispanic Society de America, el Museo Estatal de San Petersburgo, el Museo Rufino Tamayo de México, el Museo Reina Sofía de Madrid, el Guggenheim de Bilbao o el IVAM. En concreto, el museo de arte moderno valenciano cuenta con cinco esculturas de Valdés: Amelie III (2002), de bronce y hierro; Libros (2001), de madera; Dorothy (2000), de madera; Infanta IV (1985), de mármol; y Bodegón Morandi VIII (1985), de hierro.

Algunas de las grandes esculturas de este artista valenciano afincado en Nueva York han pasado por la plaza Vêndome de París, el Jardín Botánico de Nueva York, el castillo de Chambord en el valle del Loira o la avenida de Broadway en la gran manzana.