El Foro Social del Rototom es el valor añadido que tiene el festival respecto al resto de eventos musicales que se realizan en Benicàssim. El espacio, acostumbrado a la presencia de grandes defensores de los derechos humanos y difusores de conciencia social, recibió ayer a Mohamed Ben Cheikh, Premio Nobel de la Paz en 2015 por su papel clave en la resolución del conflicto de Túnez, que comenzó con la Revolución de losJazmines en 2011.
Cheikh contó su experiencia como mediador, describiendo las claves del éxito en su caso y ofreciendo su siempre importante punto de vista acerca de los conflictos que están ocurriendo en la actualidad. Un testimonio impactante a la par que necesario en los tiempos que corren hoy en día, y una muestra más de la capacidad del festival para reunir a símbolos de la lucha por un mundo más justo.
Mohamed Ben Cheikh explicó en el Foro Social que todas las crisis deben afrontarse como una oportunidad para avanzar hacia una sociedad más justa, y ese espera que sea el corolario de la coyuntura mundial actual.
Se trata del tercer nobel que interviene en el Rototom, antes lo hicieron la guatemalteca Rigoberta Menchú, activista por los derechos humanos y embajadora de la UNESCO, y Shirin Ebadi, primera jueza de Irán en la historia y primera mujer musulmana en lograr el premio.
