La 33 edición del Festival Internacional de Cine de València-Cinema Jove, que se celebrará del 22 al 29 de junio, dedicará un ciclo dedicado a la etapa de juventud del director Brian de Palma. Así, «El joven Brian de Palma» será una retrospectiva que incluye títulos ya míticos como Carrie o Vestida para matar y que presenta atractivos como contemplar a un Robert de Niro casi imberbe en una cinta independiente rodada en 1968, Saludos.

Así la sección del certamen -impulsado por el Institut Valencià de Cultura (IVC)- abordará la producción del cineasta estadounidense hasta los 40 años, mucho antes de rodar Los intocables de Eliot Ness o Misión: imposible.

El ciclo incluye una película inédita, los primeros éxitos comerciales y de crítica del director y, en conjunto, un buen elenco de películas que muestran su evolución desde el cine más experimental de finales de los sesenta hacia el híbrido entre suspense, erotismo y cine de terror que lo caracterizó en los setenta. Brian De Palma sucede así a David Lynch en esta sección de Cinema Jove en la que, como cada año, se aborda la etapa juvenil de un cineasta consagrado.

Carrie o Vestida para matar son algunos de los títulos más conocidos dentro de un ciclo que consta de ocho películas, que se proyectará íntegramente en el Centre del Carme y que tendrá un colofón muy especial: el documental De Palma, grabado durante diez años y en el que el propio director analiza una carrera extensa que abarca casi seis décadas.

El origen experimental

Los inicios de Brian De Palma se zambullen en el terreno del cine experimental más arriesgado. Es el caso de Saludos (1968), la segunda incursión en la gran pantalla de un jovencísimo (y entonces desconocido) Robert de Niro, integrante del disparatado trío protagonista de esta cinta claramente independiente. Es también el caso de Murder à la mod (1968), película inédita que constituye una auténtica rareza y muestra los lenguajes narrativos explorados por el director en sus inicios, muy alejados del cine de género de corte clásico que cultivó más tarde.

Otra de las curiosidades del ciclo es la particular revisión de los mitos del fantasma de la ópera y de Fausto que realizó el director en 1974 y que dieron lugar a El fantasma del paraíso, una suerte de ópera rock satírica que entra en el terreno del kitsch y que, para muchos, está emparentada con el musical de culto quizá más famoso de la historia, The Rocky Horror Picture Show.

Para entonces, Brian De Palma ya empezaba a ser un director conocido gracias a un largometraje anterior, Hermanas (1973), claramente inspirado en el maestro Hitchcock y que también se podrá disfrutar en la 33 edición de Cinema Jove.

Esta película supuso, en su día, el primer éxito tanto de crítica como de público de Brian De Palma y, también, un impulso importante en la carrera de la actriz protagonista, la canadiense Margot Kidder, recientemente fallecida y recordada por el gran público por encarnar a Lois Lane, la novia de Superman en la famosa saga cinematográfica de los ochenta. El siguiente título del director, en la misma línea del thriller, fue Fascinación (1976), que ya contó con una nominación a los Oscar.

Avanzada la década de los setenta, Brian De Palma lleva al cine, por primera vez en la historia, una novela de Stephen King, lo que supone la incursión definitiva del director en el cine de terror, género que hasta entonces había bordeado. El resultado, Carrie (1976), fue un auténtico bombazo internacional, un éxito de taquilla y, de nuevo, una catapulta para su actriz protagonista, una jovencísima Sissy Spacek.

A partir de aquí, la carrera de Brian De Palma, que entonces tenía sólo 36 años, ya empieza a ser la de un nombre definitivamente reconocido en la industria cinematográfica.

También están incluidos en el ciclo títulos posteriores como La Furia (1978), protagonizada por Kirk Douglas y John Cassavetes, y otro de los largometrajes más celebrados en la trayectoria del director estadounidense, la inquietante y sensual Vestida para matar (1980), un thriller que devuelve la filmografía de De Palma al terreno del suspense más hitchcockiano y que cuenta con la memorable interpretación de Michael Caine en el papel del ambiguo doctor Robert Elliott.