El Palacio de Tokyo de París interroga la historia y la herencia de las revueltas de mayo del 68 con una intervención monumental en su fachada realizadas por el artista valenciano Escif.

En su intervención el artista ha reproducido algunas de las famosos grafitis de las revueltas estudiantiles de mayo del 68. Este proyecto continua el proyecto realizado en mayo del 2016 por el pintor griego Stelios Faitakis que cuestionaba, a traves de dos murales, la herencia del pensamiento situacionista y de mayo del 68 en las revueltas contemporaneas.

Estas intervenciones se situan en el contexto de Lasco Project, programa de Arte Urbano del Palais de Tokyo, que se desarolla en el edificio con intervenciones de diferentes artistas internacionales. El recorrido continua en el sotano del Palais de Tokyo con una nueva intervención del artista Paul Loubet, ganador del premio Révélation d'Art Urbain otorgado por la ADAGP en 2017.

"Me gusta jugar con los limites, como pintar una pintura mural que no sea una pintura mural. Pintar sin pintar: lo más interesante de la pintura es precisamente lo que no es pintura, el contexto de la intervención. (?) La pared es un limite, una herramienta del poder con la que se planifica, controla y manipula el espacio de las ciudades. El grafiti abusa de las paredes ridiculizandolas, transgrediendo su función inicial. Una pared pintada deja de ser un limite para convertirse en un caanal transversal de comunicación. Una pared pintada es una pared borrada, un acto de psicomagia, una grieta en el sistema, un mensage de esperanza que revela la posibilidad de trabajar por un mundo mejor: abrir las fronteras", dice el artista valenciano

En la fachada lateral del Palais de tokyo, Escif ha desarollado una pintura monumental y desplazado en trapantojo los elementos que la componen (banderas oficiales, puertas, escaleras de socorro, vegetación salvaje), todo estructurando la pared con escritos (los grafitis rayados clandestinamente en los cuartos de baño de la institución; archivados y catalogados previamente por el artista; algunos de las consignas que acompañaron las revueltas estudiantiles de mayo del 68).

La composición general de la fachada se inspira en el juego de sociedad de las Serpientes y las escaleras que introduce al jugador en un recorrido entre vicios y virtudes. Una manera para el artista de devolver el grafiti a la calle interrogandose la parte de situacionismo y de politica que existe en el acto de escribir sobre las paredes desde las cuevas parietales hasta las calles y los subterraneos actuales. Todo esto reiterando la celebre cita de Duchamp que decía: "El arte es un juego entre todos los hombres de todas las epocas".

Comisario: Hugo Vitrani

Escif nació en 1980. Vive y trabaja en València, España. Comenzó en el grafiti ya antes de recibir sus estudios en universitarios en Arte. Escif se recrea en el espacio público pintando murales libertarios que cuestionan las luchas actuales, los movimientos de resistencia, los desafios del capitalismo y las problematicas medioambientales que enturvian nuestra epoca.

En los últimos años, destacan sus intervenciones en el IVAM, en el museo Power Station de Shanghai (China, 2016) o incluso su participación en el proyecto "Dismaland" organizado por Banksy en Weston-super-Mare (Inglaterra, 2015). Ha realizado un gran numero de proyectos en contextos urbanos, desde las calles de España a las de Thailandia, pasando por Polonia, India o Senegal, siempre en contacto directo con el púbico y la realidad del contexto, sin filtros.

Escif trabaja actualmente en un proyecto monumental de reforestación a través del arte de una montaña en el golfo de Sapri, en Italia. En 2014 realizó la portada del último disco del conocido músico irlandes Damien Rice, con quien ha colaborado en diferentes ocasiones. En 2015 autoeditó su segunda monografía, "Elsewhere".